La temporada 2024 para Honda se está convirtiendo en una pesadilla. Pese a las concesiones y al nuevo concepto de moto, los japoneses parecen no haber avanzado nada desde la pasada temporada. Últimos en el mundial de constructores, solo pelean con Yamaha y entre ellos en las últimas posiciones de la parrilla por pescar unos pocos puntos. Los test privados en Jerez o Mugello no están dando los resultados esperados y sus pilotos se desesperan.
Joan Mir, que llegó el año pasado tras la huida de Suzuki, es uno de esos pilotos que están viviendo el drama de la marca del ala dorada. Este año está siendo la mejor Honda con tan solo 12 puntos en su casillero. El campeón del mundo de MotoGP en 2020 ha hablado sobre su futuro: "Estoy convencido de que opciones tendremos, no las que a mi me encantaría, seguramente no, pero opciones tendremos. Todavía damos gas y estoy convencido de que con una moto competitiva no tardaríamos en estar delante".
