El piloto de Rosas, Maverick Viñales, se muestra maduro a sus 27 años. Tras los pasos dados por el mundial de motociclismo, su rumbo le ha llevado a Aprilia. Allí se ha encontrado con su anfitrión, pues Aleix ha trabajado en esa moto para hacerla a su medida y Maverick quiere plasmar su propio estilo, no plagiar el de otros, pero eso le llevará tiempo. Aunque parece que en el equipo se lo sarán; sin embargo, Viñales considera que sus decisiones deben ser tomadas con la cabeza, ya que no solo se trata de él mismo, la vida lejos del circuito sigue su curso y él no es una excepción.
"En muchos años no he podido sacar todo lo que tengo. Quiero hacerlo, quiero sacarlo, más que nada para mí, para quedarme más tranquilo. No quiero parar hasta que lo haga. Necesito sacar lo máximo que tengo dentro. En Aprilia se puede sacar, pero hace falta tiempo. Puedo intentar ir como Aleix, pero debo ir natural, que me salga mi pilotaje de forma natural, que no tenga que pensar al pilotar. Tengo que lograr que la moto vaya con mi estilo. Él la tiene por la mano, lleva muchos años con la misma moto".
"Decidiré con la cabeza porque ahora ya tengo más personas que dependen de mí, no soy yo solo. Sobre Aleix todo depende de las ofertas que tenga. Él aquí ha construido un equipo muy bueno. Yo es que soy muy valiente, soy muy atrevido, yo me lanzo a cualquier cosa, no sabría qué aconsejarle. Yo le aconsejaría que apostara por él, que fuera egoísta porque con la Aprilia está yendo muy rápido. Mi consejo sería que no mirara alrededor y apostara por él a tope".