En el pasado GP de Austria vivimos el (pen)último episodio de la guerra Hamilton-Rosberg. Una guerra que parecía zanjada, pero que se reabrió esta temporada, ya con libertad de atacarse y sin órdenes de equipo. Pero vamos a ver dónde y cuándo empezó todo.
GP Malasia 2013: Tras la retirada de Michael Schumacher a finales de 2012, sangre fresca llegaba a Brackley, con la nueva pareja compuesta por Hamilton y Rosberg pisando fuerte. Tras un flojo 2012, el 2013 empezaba bien para ellos, con un coche rápido.
Segundo GP del año, y la calma se rompió. Todos recordamos aquel duelo Vettel-Webber, pero otro duelo por detrás se abrió: Hamilton iba tercero y Rosberg cuarto. Durante toda la carrera estuvieron alternando las posiciones, pero en el último tramo de carrera, los calmaron. “Keep the pace, don’t attack” (Mantened el ritmo, no ataques), le dijeron a Rosberg.
Hamilton cruzó la meta en tercera posición, y Rosberg en cuarta. Nico decía por radio al terminar la carrera: “Remember this one” (Recordad esta). Empezaba una guerra, que tendría una tregua ese año con ese único incidente.
GP Mónaco 2014: La llegada de los motores híbridos a la F1 hizo que Mercedes tomara el relevo de Red Bull como equipo dominante. La marca de la estrella igualaba a sus pilotos, y les dejaba competir. En el GP de Mónaco, Hamilton llegaba líder del Mundial tras cuatro victorias consecutivas y por 3 puntos de diferencia sobre Rosberg.
El alemán llevaba dominando todo el fin de semana, pero la pole no estaba asegurada. En el primer intento de Q3, Rosberg se llevaba el mejor tiempo, y tenía la pole provisional. En el segundo, salió por delante de Hamilton. En su vuelta rápida, llegaba el momento clave: llegaba a la curva de Mirabeau, quinta curva del circuito, con una, relativamente, amplia escapatoria.
Así, Rosberg bloqueaba su neumático delantero izquierdo, no tomaba la curva, y provocaba una bandera amarilla, que impedía que Hamilton mejorara su tiempo y le quitara la pole, un caso similar al “parking” de Schumacher para molestar a Alonso en 2006. El káiser no se libró de la sanción, pero Rosberg sí. Salió desde la pole, ganó y volvió al liderato del Mundial. La guerra volvía al box de Mercedes.
GP Bélgica 2014: Como el Desembarco de Normandía en la Segunda Guerra Mundial, el GP de Bélgica marcó un antes y un después en la guerra Hamilton-Rosberg. El alemán era el líder del Mundial por 11 puntos sobre Hamilton, tras el loco GP de Hungría. El sábado, la pole se la llevó Rosberg en una lluviosa clasificación, pero en la carrera perdía la primera plaza en favor de Hamilton en la salida.
En la segunda vuelta, Rosberg intentó devolvérsela en la curva de Les Combes por el exterior, pero deceleró y tocó con su alerón delantero el neumático trasero izquierdo de Lewis. El británico pinchó el neumático, la carrera se arruinó para ambos, y Mercedes tomó medidas, que se vieron en el GP de Italia siguiente.
GP Estados Unidos 2015: Tras un año donde Hamilton dominó con mano de hierro, llegábamos al final de la temporada, en el GP donde el británico podría coronarse como tricampeón siempre y cuando ganara la carrera.
Pero Rosberg no quería ponérselo fácil, y se llevó la pole en ese GP. Hamilton era consciente de la importancia de ese GP, aunque tendría más opciones de ser campeón. Pero quería serlo en EE.UU, su segundo hogar.
Y así, Hamilton se tiró a cuchillo en la primera curva, llegando a empujar a Rosberg y sacarlo de la pista. El británico ganó esa carrera, y se proclamó campeón.
GP España 2016: Y llegó el 2016, donde Rosberg ha empezado dominando tal y como lo hizo Hamilton en 2015. En España, Hamilton se hizo con la pole, pero, como de costumbre este año, salió mal, y Rosberg le pasó en la salida.
Tras salir con un mapa de motor erróneo, Rosberg intentó corregirlo en la curva 3, antigua curva Renault, mientras Hamilton intentaba pasarlo. A la salida de la curva, el alemán seguía girando, y Hamilton, que no cedió siguió queriendo pasarlo por la derecha. Hamilton se salió de pista, perdió el control de su coche, trompeó y pasó. Ambos Mercedes colisionaron y quedaron fuera de carrera. Hamilton y Rosberg volvían a estar en pie de guerra, y esta vez parecían irreconciliables.
GP Austria 2016: Y el último episodio de esta guerra: el GP de Austria. Nos situamos. Última vuelta del GP, y Hamilton, segundo, está a tiro de Rosberg, líder. Tras múltiples intentos, el tricampeón no aguantó más, y se echó a por el en la curva Remus, la segunda del circuito.
Rosberg, con aparentes problemas de frenos, aguantó la frenada todo lo que pudo, intentó echar a Hamilton de la pista, pero el 44 giró y… el alerón delantero de Rosberg se rompió. Hamilton ganó la carrera, y Rosberg fue el culpable.
Estos han sido todos los episodios de esta guerra fratricida entre los de Mercedes. Creo que no veremos más guerra en la marca de la estrella, ya que Toto Wolff y Niki Lauda tomarán las medidas adecuadas para ellos: órdenes de equipo.