Cuando se apagaron los semáforos, Max Verstappen y Charles Leclerc no se atacaron en los primeros metros, como sí había sucedido en la sprint de ayer, por lo que mantuvieron sus posiciones de salida. Por detrás, Russell arrancó mejor que Sainz y le adelantó en la curva 1, pero el español no levantó el pie del acelerador y siguió presionando al Mercedes hasta que recuperó su posición antes de la curva 3. Debido a este duelo, Pérez estuvo a la estela de ambos, esperó su momento y entró en lucha contra el británico, estuvieron en paralelo durante toda la "recta" hasta la llegada de la curva 4, en la que Checo se lanzó por el exterior, ya estaba por delante, pero George le tocó la rueda trasera, le catapultó a la grava y cayó al final del pelotón. Por este incidente, el mexicano cambió gomas en la vuelta siguiente, aunque se descolgó tanto del grupo que tuvo que retirarse más tarde porque no iba a conseguir nada.
Antes del decimoquinto giro, Verstappen estaba sufriendo con la degradación de sus neumáticos Medios, por lo que fue uno de los primeros en cambiar gomas, mientras que ambos Ferrari se situaban en cabeza, eso sí, sin parar. A pesar del pit stop del neerlandés, la estrategia de la escudería italiana se mantuvo intacta y solo pararon a sus pilotos cuando estaba estipulado. Gracias a haber seguido con su plan, sin importar lo que haya hecho Verstappen, Leclerc recuperó el liderato al haber adelantado al único Red Bull en la pista. Como la vida de los neumáticos Medios y Duros era inferior al de sus rivales directos, Max estuvo obligado a parar por segunda vez antes de lo previsto. Por segunda ocasión consecutiva, los estrategas de Maranello no se dejaron influir por las decisiones de Red Bull, así que pararon cuando les tocaba y evitaron cualquier acción precipitada.
Una vez más, Leclerc adelantó a Verstappen en pista y, vueltas más tarde, Sainz iba hacer lo mismo. Cuando el español ya tenía a tiro al Red Bull y podía activar el DRS, perdió velocidad de repente y una humareda blanca salió de la parte trasera de su F1-75, obligándole a abandonar. El doblete de Ferrari estaba en la mano hoy, pero la fiabilidad volvió a fallar y otro gran resultado se les escapó por este motivo. Por si no fuera suficiente drama, Leclerc estaba informando que el acelerador se le quedaba atascado, lo que era un serio problema en las curvas, aunque hizo un trabajo excelente para compensar este hándicap e intentar mantener la distancia con Verstappen, que se quedó a un segundo y medio del Cavallino Rampante.
Después de 71 vueltas a la pista de Spielberg, Leclerc temió por su victoria, pero lo hizo lo imposible para tener a la fiabilidad de su lado y sumar la tercera de la temporada, la última fue en el GP de Australia hace tres largos meses. Verstappen sufrió con la degradación durante la mayor parte de la carrera, aunque el segundo puesto es un buen resultado final dadas las circunstancias. Por último, Lewis Hamilton remontó desde la octava plaza, su pilotaje, la estrategia y los incidentes por delante hicieron que subiera al podio por tercera vez consecutiva en 2022.
Por detrás, Russell finalizó cuarto, Ocon quinto, Mick Schumacher sumó su mejor actuación en F1 al terminar sexto, Norris fue séptimo, Magnussen octavo, Ricciardo noveno y Fernando Alonso terminó en los puntos tras una remontada de libro desde la última plaza.