Ferrari hizo bien en Austria...esta vez

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En el equipo Ferrari están las cosas bastante claras en lo que a pilotos se refiere: Sebastian Vettel es el piloto principal y el que está liderando la pelea por el título de Fórmula 1, tanto de pilotos como de constructores. Kimi Räikkönen es un hombre que, aunque no se perfila como primer piloto ahora mismo, sería un error considerarlo escudero, como hicieran los del Caballino Rampante en los años noventa con Eddie Irvine y en la entrada del nuevo siglo con Rubens Barrichello, ambos para echarle un cable a Michael Schumacher en su tarea de devolver a Ferrari a lo más alto.

Al final del pasado Gran Premio de Austria Max Verstappen estaba en cabeza, pero detrás surgían Räikkönen – en su mejor carrera de la temporada – y Vettel, con una gran remontada desde la octava posición y una tremenda oportunidad tras el abandono de Lewis Hamilton por problemas en su Mercedes. Verstappen aguantó hasta el final en cabeza gracias a una gestión inteligente de neumáticos (levantando algo más en las dos últimas curvas para no destrozarlos y tener el temido blistering), seguido de los dos monoplazas rosso corsa.

Muchos pronosticaban, desde el sofá de sus casas o incluso desde cabinas de comentaristas, que Vettel acabaría segundo y Kimi tercero. La realidad no fue así, con el finés entrando en meta por detrás de Verstappen y delante del alemán. De hecho, Räikkönen marcó la vuelta rápida al final, como muestra de lo fuerte que estaba yendo para dar caza al holandés de Red Bull.

Hay que recordar una serie de factores: el primero, que aún queda mucha temporada por delante. Estamos a mediados de julio con muchas carreras en el calendario y el intercambio de posiciones supondría una diferencia de tres puntos (18 para el segundo y 15 para el tercero). Ferrari no se ve en la situación de priorizar a Vettel hasta ese punto, incluso cuando ahora es líder del mundial y Räikkönen tiene mucha menos posibilidades reales de pelearle el título a Hamilton – el gran rival de Ferrari ya que el otro piloto de Mercedes, Valtteri Bottas, tiene menos puntos que Räikkönen tras su abandono en Austria.

Por otro lado, en las últimas vueltas reapareció una sombra sobre el box de Ferrari: la del recuerdo de Austria 2002, cuando Barrichello superó a Schumacher en este mismo circuito durante toda la carrera y le dejó pasar en la última vuelta – fue obligado a ello, pues estaban amenazando con echarle del equipo si no lo hacía. Esto provocó un gran malestar hacia Ferrari por parte de millones de seguidores, además de ser el detonante de la prohibición de órdenes de equipo que no se levantó hasta hace unos años.

Además, la situación de 2002 era bien distinta: Ferrari, con su sensacional F2002, era la gran fuerza dominante con Schumacher, apisonando incluso a McLaren y Williams tanto en clasificación como en carrera. El Kaiser tenía tanta ventaja en la clasificación que poco después del bochorno de Austria, en el Gran Premio de Francia, se aseguró su quinto título. Es decir, que antes de acabar el mes de julio ya había un campeón matemático: quedaban por disputarse los grandes premios de Alemania, Hungría, Bélgica, Italia, Estados Unidos y Japón. Salvo en Malasia y Gran Bretaña, Schumacher y Barrichello se disputaron todas las carreras de la temporada.

El propio jefe de Mercedes F1 Toto Wolff considera que la decisión de Ferrari es acertada: “Nosotros no lo hubiéramos hecho y no me sorprende que ellos no lo hicieran. Creo que por el bien del deporte, por los fans y por los propios pilotos, en esta parte de la temporada, primeros de julio, ese cambio de posición hubiera sido brutal”, declaró según cuenta el medio Motorsport.com.

“Estamos en la carrera número 9, aún queda mucho y creo que nos debemos a los fans – y es también nuestra mentalidad de carreras – por lo que no nos vamos a poner a jugar con el campeonato de pilotos en junio o julio. Obviamente a final de temporada, si llega el último tercio y se ve que hay una ventaja clara para uno de los pilotos, llega la desafortunada situación en un equipo en el que hay que contemplarlo. Pero ahora mismo no”, añadió Wolff.

Cuando la cadena británica Sky Sports preguntó a Vettel si esperaba un cambio de posición para favorecerle en la clasificación general, aseguró que no era así. “Kimi hizo todo lo que pudo (para atrapar a Verstappen). Yo trataba de alcanzarles a los dos. Kimi estaba yendo a fondo y yo estaba yendo a fondo. Los dos nos estábamos acercando pero no fue suficiente”, dijo el tetracampeón mundial.

Por tanto, queda claro que Ferrari no sólo tomó la mejor decisión (o mejor dicho, no se tomó la peor), sino que además dejó sacar a Räikkönen lo mejor de sí mismo, ahora que se estipula sobre su futuro con Charles Leclerc llamando a las puertas de Ferrari tras cinco carreras consecutivas en los puntos con su modesto Sauber. También hay que recordar que con el segundo y tercer puesto (sin importar el orden), Ferrari es ahora líder en el campeonato de constructores por 10 puntos sobre Mercedes.