Debido a la salida de Ferrari por la puerta de atrás, Sebastian Vettel se había quedado sin equipo para 2021, así que solamente había la opción de un año sabático a la espera de tener una oportunidad en 2022 o colgar los guantes. Contra todo pronóstico, Lawrence Stroll y Aston Martin han sido fundamentales a la hora de evitar que el alemán tomara alguna de esas dos opciones, ya que pasó de estar con un pie fuera de la F1 a convertirse en la punta de lanza de un nuevo proyecto.
El directivo canadiense tiene claro lo que quiere conseguir con su escudería de F1, la llegada de personal ha sido contundente y Sebastian es una pieza clave de este puzzle. Esta temporada está siendo de fortalecimiento de cara al cambio de normativa del próximo año, una oportunidad perfecta para intentar escalar dentro de la zona media y, más adelante, crecer hasta el punto de aspirar al título.
Lawrence está haciendo todo lo posible para que este proyecto tenga una larga vida y sea exitoso, así que contar con un tetracampeón del mundo es positivo porque aporta experiencia y conocimientos para avanzar en la dirección correcta.
"Sebastian y yo nos conocemos desde hace mucho tiempo y él sabía mis planes para el equipo. Cuando nos convertimos en Aston Martin, no solo había cambiado el nombre, sino también los planes de negocio. Estuvimos reclutando a más de 250 personas, no ha sido cantidad, sino también calidad, todo lo que hemos traído a Aston Martin es para ganar campeonatos".
"No es una travesía de un día, una semana o ni siquiera un año, es un camino que llevará muchos años y Sebastian quería formar parte desde el principio y ojalá esté siempre. Obviamente, tener a un cuatro veces campeón del mundo y la experiencia que trae al equipo, uno que nunca ha sido campeón, es la manera de pensar y de actuar", ha concluido el alto cargo de Aston Martin en el podcast de la F1, Beyond the Grid.