Con el ritmo que había demostrado el heptacampeón del mundo en la clasificación, quedándose a escasas milésimas de Leclerc y Pérez, era un claro candidato a la victoria. Sin embargo, Sainz fue el encargado de trastocar los planes de Mercedes cuando adelantó a Hamilton en las primeras curvas.
A partir de ese momento, el W13 fue la sombra constante del monoplaza italiano, pero fue totalmente imposible recuperar el tercer lugar. La vuelta 33 marcó un punto de inflexión en la carrera del británico, ya que había impactado contra las barreras de la curva 7, cayó en el grupo de Norris y Verstappen, y su alerón delantero quedó dañado. En el momento que entró en boxes para cambiar los intermedios por los neumáticos medios, los mecánicos también le cambiaron el alerón delantero, lo que supuso una pérdida de tiempo extra. Debido a un pit stop de casi 14 segundos, cayó a la novena plaza y no tuvo oportunidad de optar a un resultado mejor por la dificultad para adelantar en esta pista.
"Creo que comenzamos con un buen fin de semama, pero fue realmente desafortunado al final. Me disculpo con el equipo, es una pena que no lográramos más puntos. Pero vivimos, aprendemos y nos recuperaremos. Tenemos mucho que revisar de este fin de semana. Tengo muchas ganas de Suzuka", concluye el británico en el comunicado publicado en la página de Mercedes AMG F1.