La temporada 2025 de Fórmula 1 ha sido larga e intensa, pero en las estadísticas de fiabilidad han emergido dos nombres por encima del resto: George Russell y Franco Colapinto. Estos dos pilotos se han convertido en los únicos de la parrilla en completar el 100% de las carreras que han comenzado, un logro que subraya la perseverancia del joven argentino en un año complicado y la extrema constancia del británico.
El caso de George Russell es un ejemplo de regularidad. El piloto de Mercedes ha terminado las 24 carreras del calendario, un hito por sí mismo, pero su consistencia se extiende a los resultados. Russell ha finalizado 23 veces en la zona de puntos y solo en Mónaco se quedó fuera del 'top 10'. Con solo cinco resultados fuera del 'top 5', esta fiabilidad inquebrantable fue clave para que terminara cuarto en el Mundial de Pilotos y contribuyera decisivamente al subcampeonato de Constructores de Mercedes.
Junto a Russell, la gesta es aún más meritoria para Franco Colapinto. El piloto de Pilar regresó a la parrilla como titular de Alpine a partir del Gran Premio de Emilia Romaña, reemplazando a Jack Doohan. A pesar de los problemas técnicos que rodearon a su equipo, Colapinto ha conseguido ver la bandera a cuadros en todas las carreras principales que ha iniciado. Su único contratiempo fue un accidente en la Sprint de Brasil y un DNS (Did Not Start) en Gran Bretaña, que no cuenta como abandono (DNF), salvando así su estadística perfecta de finalización.
El desempeño del argentino a lo largo del año mostró una curva de progresión notable. Su mejor resultado fue un undécimo puesto en Países Bajos, rozando los puntos. Además, tuvo momentos brillantes de competitividad, como en Estados Unidos, donde logró ser más rápido que su experimentado compañero de equipo, Pierre Gasly, tanto en la Sprint como en la carrera principal. Su capacidad para gestionar los recursos y evitar daños, en medio de la competitividad extrema, es francamente destacable.
De los 20 pilotos que han participado esta temporada, solo George Russell y Franco Colapinto han logrado ver siempre la bandera a cuadros. Uno, con la ventaja de un equipo de élite, y el otro, navegando las dificultades de un proyecto en desarrollo. Este logro estadístico subraya que, más allá de la velocidad pura, la gestión de la carrera y la fiabilidad son virtudes esenciales que ambos pilotos han dominado a la perfección en un curso largo y exigente.