Sudáfrica muestra su interés en volver a la competición. El hueco que deja el GP de los Países Bajos para el año 2027 abre la ventana de posibilidades para nuevos circuitos de adherirse al calendario de la competición a partir de ese año, y desde el sur del continente africano ya se mueven para intentar lograr la financiación necesaria.
Según el Gobierno del país, se necesita una inyección de 50 millones para hacer realidad este sueño, y ya están trabajando con marcas y posibles sponsors para poder presentar un proyecto en firme que cumpla con las normativas, los requisitos y las regulaciones para poder llevar a cabo con plenas garantías el desarrollo del evento. Se especula que desde la capital del país se estaría negociando estos términos con marcas de bebidas como Heineken y Red Bull, que serían posibles inversores para esta ambiciosa candidatura.
A nivel de ubicaciones, hay dos que son las que más resuenan dentro del panorama nacional surafricano, ¿en Ciudad del Cabo o en Johannesburgo? La opción Johannesburgo cuenta con el mítico circuito de Kyalami, que ya albergó varios grandes premios hasta la última vez que la F1 pisó el país en 1993 hace ya 32 años. La otra es un circuito urbano en Ciudad del Cabo, propuestas no en vano, ya que en la actualidad hay un trazado existente de 5,7 km de distancia que se usa para el gran premio de Sudáfrica de la Fórmula E.
Aún por concretar muchos aspectos y ver si la viabilidad del proyecto compensa al país, la probabilidad de volver a ver a los monoplazas rodar por suelo africano toma cada vez más y más fuerza.