Toyota regresa a la Fórmula 1, pero esta vez lo hace de la mano de Haas y no como equipo oficial. Tras 15 años de ausencia, la marca japonesa ha firmado un contrato plurianual con la estructura estadounidense bajo su división Toyota Gazoo Racing, convirtiéndose en su nuevo socio técnico. Este nuevo rol dista mucho de su etapa anterior en la categoría, cuando, entre 2002 y 2009, competían como fabricantes y motoristas.
La historia de Toyota en la Fórmula 1 comenzó a fraguarse en 1999, tras años complicados en el mundo del motorsport. Anteriormente, habían sido descalificados del Mundial de Rally en 1995 por una infracción técnica y, aunque volvieron al WRC en 1998, un nuevo golpe con el famoso "trata de arrancarlo, Carlos" en la voz de Luis Moya durante el Rally de Gran Bretaña llevó a la marca a buscar un cambio de rumbo. Así, en 2002 debutaron en la Fórmula 1 con Allan McNish y Mika Salo al volante de su primer monoplaza, el TF102.
El comienzo de Toyota en la F1 no fue ideal, logrando solo dos puntos en su temporada inaugural. Sin embargo, a lo largo de los años, su rendimiento fue en ascenso, alcanzando su mejor temporada en 2005 con el TF105, que les dio cinco podios, dos poles y un cuarto lugar en el campeonato de constructores. Pese a estos logros, la victoria en una carrera nunca llegó, lo que llevó a la marca japonesa a retirarse de la categoría en 2009.
A pesar de los rumores de un posible regreso, Toyota no volvió a la Fórmula 1... hasta ahora. Haas, que ha mostrado una mejora considerable en su rendimiento esta temporada, será quien cuente con el apoyo técnico de Toyota Gazoo Racing para seguir progresando. Aunque la colaboración no pone a Toyota en la parrilla como un equipo oficial, la presencia de la marca japonesa vuelve a ser un factor relevante en el campeonato.