El Porsche 919 Hybrid #20 de Webber/Berhard/Hartley finaliza la jornada de miércoles con el mejor tiempo y la pole provisional tras marcar éste último un tiempo de 3’23’’157. Jornada atípica pues a las continuas banderas rojas de la sesión de entrenamientos libres se le han unido las banderas rojas de esta sesión de clasificación.
La primera de ellas cuando apenas llevábamos 30 minutos de bandera verde. Aparentemente el Porsche #67 de IMSA Performance Matmut que ya provocó una bandera roja en libres, sufrió una salida de pista y necesitó la ayuda de la grúa. 20 minutos más tarde, se volvía a la acción, aprovechando algunos equipos para realizar el primer relevo de pilotos.
Lucas Ordoñez salía a pista, con deberes atrasados, y completaba la primera vuelta de instalación para el Nissan Zeod RC. Primera vuelta, y desgraciadamente última, pues los acontecimientos posteriores no dieron oportunidad de progresar. Y es que tras menos de 15 minutos de pista despejada sucedían dos acontecimientos; el Toyota #7 de Wurz/Nakajima/Sarrazin, con el francés al volante perdía potencia y se quedaba detenido en las curvas Dunlop, apenas unos metros después del carril de entrada a boxes, y por otro parte, un Aston Martin quedaba detenido en una de las escapatorias.
Lo que parecía una simple salida de pista, acabó siendo un fuerte golpe lateral protagonizado por Fernando Rees que afortunadamente no tuvo consecuencias para el piloto, pero sí parece que las tuvo para el circuito. Tras un periodo de incertidumbre bastante largo en el que los equipos se preguntaban el motivo por el que no se continuaba la sesión, el director de carrera decidió que la sesión no se reiniciaría, quizás influido por el exceso de salidas de pista que se estaban viendo, especialmente en la zona de las curvas Porsche.
Con apenas 40 minutos de sesión en lugar de los 120 minutos programados, los Porsche 919 Hybrid acababan con un doblete, ya que la unidad de Lieb/Jani/Dumas finalizaba en segunda posición a 0,771’’ del mejor tiempo. Por detrás, los dos Toyota TS040 pero a más de 2’’ de distancia, y a más de 3’’ ambos Audi, señal inequívoca de que aún no habían ido a por tiempo antes de que la sesión llegara prematuramente a su fin. Y es que apenas superaron la decena de vueltas por unidad en esta sesión.
En LMP2 el mejor tiempo, 3’38’’843 ha caído en manos del Morgan-Nissan del G-Drive de Rusinov/Pla/Canal, más de medio segundo mejor que el siguiente participante, el Alpine de Signatech pilotado por Chatin/Panciatici/Webb. Tercera posición para el KCMG de Bradley/Imperatori/Howson, demostrado el equipo hongkonés que no han venido únicamente a lucir bandera.
El JOTA Sport de Marc Gené, si Audi no decide lo contrario, ha finalizado en duodécima posición con un mejor tiempo de 3’45’’928, muy alejado del potencial del Zytek Z11SN, y es que tradicionalmente esta sesión es utilizada para completar las vueltas obligatorias de cada piloto, y así poder forzar la máquina sin temor el día de mañana.
Sin excesivas sorpresas en GT’s, el trio de AF Corse compuesto por Fisichella/Vilander/Bruni se lleva la pole position provisional tras bajar a un demencial 3’54’’754, superando el tiempo del Aston Martin capitaneado por Bruno Senna y el Porsche 911 RSR del Team Manthey pilotado por Holzer/Makowiecki/Lietz. Antonio García pudo completar diez vueltas al circuito y marcó un mejor crono de 3’56’’443 colocándose en cuarta posición de entre los GT’s. Otro Ferrari 458, el del SMP Racing de Bertolini/Shaitar/Basov se ha llevado el mejor tiempo entre los Amateur.
Con una sesión tan accidentada, los equipos van a tener que hilar muy finos, pues no se ha podido completar el tradicional programa en el que todos los pilotos marcaban sus vueltas obligatorias para clasificar en carrera y deberán hacerlo mañana en la segunda sesión de clasificación para asegurarse salir a carrera. Sin embargo, hay riesgo de tormenta para la noche, y la tercera sesión de clasificación da comienzo a las 22:00, por lo que es posible que el tiempo de la pole se marque en la segunda sesión, igual que es probable las banderas rojas en la tercera sesión. Un error de cálculo o un error de pilotaje podría no clasificar a algún equipo para la carrera, con las nefastas consecuencias que eso tendría.