De esta forma, el piloto español de 28 años completará al finalizar este acuerdo cuatro cursos en un mismo equipo, la relación más larga de su trayectoria en la categoría de las motos pesadas.
Las negociaciones entre el mayor de los Espargaró y la marca italiana han durado más de un mes. En Austin, tercera parada del calendario, el corredor reconoció que las posturas estaban muy distanciadas, y que esperaba un gesto por parte de la fábrica de Noale.
Este parece haber llegado, tanto en el aspecto económico como en el compromiso que adquiere con el catalán, al haberle ofrecido la posibilidad de firmar por dos años.
Llegados a este punto, está por ver quién ocupará el otro lado del taller, que tiene muchos pretendientes. En este sentido, Aprilia permanece a la espera de ver qué decisión toma Suzuki sobre el futuro de Andrea Iannone, y lo mismo con Ducati y Danilo Petrucci.
Ambos casos dependen de si Jorge Lorenzo renueva con Ducati o decide cambiar de escudería, algo que en ese caso seguramente le llevaría a firmar por el constructor de Hamamatsu.
En su segunda temporada a los mandos de la RS-GP, Espargaró acumula dos sextas posiciones como mejores resultados, ambos en 2017 (Qatar y Aragón).
En este 2018, Espargaró aún no ha podido terminar entre los diez primeros por distintos problemas mecánicos. A pesar del paso adelante que ha dado el prototipo en aquello relativo al chasis, la principal limitación se centra en estos momentos en el motor, actualizado respecto de su versión del año pasado pero que sigue dando problemas por su elevado nivel de consumo.