Pedro Acosta ha sido el nombre propio del pasado GP de Portugal. El joven de 19 años se convirtió en Portimao en el piloto más joven de la historia en pisar un podio de MotoGP. Tras una gran carrera en la que adelantó a dos campeones del mundo como son Marc Marquez y Pecco Bagnaia, el de Mazarrón aprovechó el abandono de Maverick Viñales para subir al podio en tercera posición.
A pesar de los buenos resultados y colocarse como una de las referencias de su marca, Pedro cree que todavía hay aspectos a mejorar: “En las sprint se nos hace un poco de bola desde la salida, pero sobre todo con el setting de la moto, nos falta que la moto esté más pegada al suelo, que es lo que nos da ir con el depósito lleno de gasolina. Creo que debemos mejorar en las sprint, pero las carreras (largas), más o menos las tenemos”.
También se ha mostrado contento con el recibimiento que ha tenido tanto en KTM como en la estructura de Tech 3: “El equipo lo está llevando muy bien, yo se que no soy la persona más fácil en un fin de semana de carreras y que me irrito con facilidad. Cada vez que me despierto por la mañana tengo un montón de mensajes en el móvil de los técnicos y los ingenieros, con cosas que ver y que mejorar. Ellos también están haciendo un buen trabajo”.