Fabio Quartararo no logró alcanzar su primer objetivo del fin de semana en el Gran Premio de Tailandia: clasificarse directamente para la Q2. El francés, que guarda un buen recuerdo de este circuito tras su intenso duelo con Marc Márquez en 2019, mostró destellos de su mejor versión en algunos tramos de la sesión, pero finalmente terminó en la posición 12, a casi seis décimas del tiempo de Márquez, quien lideró la tabla de tiempos del día.
Quartararo ya había anticipado que la carcasa de neumático introducida en esta carrera podría afectar negativamente a los fabricantes que, como Yamaha, tienen dificultades para aplicar la potencia al suelo. Aunque el piloto de Niza se mantuvo en la zona alta durante varios momentos de la sesión, la falta de agarre en la parte trasera de su M1 se hizo evidente al llegar el momento crucial, complicando su pase directo a la Q2.
El francés explicó que su Yamaha rinde bien en el ritmo de vuelta a vuelta, pero que exige demasiado en la vuelta rápida, generando un movimiento excesivo que le impide mantener el control necesario. “Me esperaba estar mejor en esta carrera, sobre todo en la vuelta rápida, pero estamos demasiado tiempo con la rueda trasera en el aire, y allí simplemente perdemos tiempo”, comentó Quartararo, quien tendrá que luchar en la Q1 el sábado para intentar asegurar un lugar en la fase final de clasificación.
Ya cansado de probar sin éxito nuevas soluciones, el piloto de Yamaha recordó la serie de modificaciones probadas este año en su moto, desde cuatro motores distintos hasta cuatro chasis adicionales. Sin embargo, ninguna ha logrado resolver el problema que tanto le aqueja: la falta de adherencia de la rueda trasera.