Fabio Quartararo no pudo replicar en la carrera del domingo su brillante actuación del sábado en el Gran Premio de Qatar. El piloto francés había devuelto a Yamaha a la primera fila de parrilla por primera vez desde Assen 2022 y firmó un destacado tercer puesto en la sprint. Sin embargo, el domingo se vio atrapado por el pelotón tras una mala salida y finalizó séptimo, a más de doce segundos del ganador, Marc Márquez.
Al terminar la prueba, el campeón de 2021 reconoció que el inicio fue determinante en su rendimiento: “Las primeras vueltas no han sido muy divertidas. Hemos tenido el mismo problema de siempre: sin agarre cuando la pista no está en su mejor momento. Luego mejora, pero ya es tarde”. Quartararo explicó que la falta de tracción le obliga a cambiar completamente su estilo de pilotaje respecto a la sprint.
Además, el francés lamentó lo difícil que es luchar dentro del grupo con la actual M1: “Estamos atascados. Cuando nos pasan, son mucho más rápidos. Luego no tenemos agarre, ni potencia, y sufrimos mucho con el wheelie. Nuestro único punto fuerte es la frenada en vertical, pero si no podemos adelantar, no sirve de nada”. El piloto de Yamaha insiste en que es urgente introducir piezas nuevas que mejoren la tracción.
No obstante, esas esperadas actualizaciones podrían no llegar hasta después del Gran Premio de Francia. “Parece que no estarán listas para el test de Jerez, sino más bien después de Le Mans”, reveló. Quartararo admitió que Yamaha ha probado muchas soluciones sin encontrar todavía un avance real, pero mantiene la esperanza: “Quiero luchar con los líderes lo antes posible, aunque sé que llevará tiempo. Como mínimo, me gustaría poder pelear un poco más”.