Maverick Viñales firmó una sólida quinta posición en la carrera sprint del Gran Premio de Francia, consolidándose entre los más competitivos del campeonato. En una jornada positiva para KTM en cuanto a ritmo, el de Roses fue el único de la marca que cruzó la meta, tras las caídas de Brad Binder y Pedro Acosta, con quien mantuvo un mano a mano vibrante hasta la última vuelta.
Viñales se mostró satisfecho por el rendimiento de su RC16, señalando que tanto él como Acosta estaban recortando terreno a Quartararo y Aldeguer en las últimas vueltas. "Me deja muy buen sabor de boca. Vamos cogiendo solidez y luchamos por estar entre los cinco primeros", explicó. Aun así, reconoció que todavía queda margen de mejora: "Hoy entraba a saco, frenaba tarde y el freno motor no estaba del todo ajustado. Mañana, con pequeños retoques, podemos rodar en 1:30".
Sobre su duelo con Acosta, Viñales destacó el aprendizaje mutuo entre ambos y valoró positivamente la competitividad mostrada por KTM pese a las caídas. “Motiva ver que la moto va bien. Cuando todas las motos están fuertes, el nivel sube automáticamente”, dijo.
Mirando a la carrera larga del domingo, el catalán confía en dar un paso adelante si logran mejorar el paso por curva y aprovechar mejor el agarre trasero: “Tenemos una buena oportunidad, vamos a intentar estar en el sitio”.