Las 24 Horas de Le Mans son una de las citas más importantes de todo el motorsport durante el año. Con el nuevo reglamento Hypercar introducido en 2023, numerosas marcas como Porsche, Peugeot BMW o Ferrari retornaron ala competición. Junto a ellos, Toyota se postulaba como uno de los favoritos a la victoria.
Como suele acostumbrar, el trazado de La Sarthe ofreció condiciones cambiantes durante toda la prueba, aumentando así la dificultad a todos los equipos. Tal fué la intensidad de la lluvia que obligó a la salida de un coche de seguridad de cuatro horas y media en la madrugada del sábado al domingo.
Ferrari volvió a vencer en Le Mans por segundo año consecutivo con su prototipo #51 comandado por Miguel Molina, Nicklas Nielsen y Antonio Fuoco. Molina se convierte en el tercer español en lograr la victoria las 24 Horas tras Marc Gené en 2009 y Fernando Alonso en 2018 y 2019.
En la salida, el Porsche #6 partió desde la pole position, seguido por el Cadillac #3 en la primera fila y los dos Ferrari de AF Corse detrás. Alex Palou arrancó en la cuarta fila con el Cadillac #2 en séptima posición. Laurens Vanthoor lideró la carrera con el Porsche #6, pero pronto fue superado por Nicklas Nielsen con el Ferrari #50. El Toyota #8, con Sébastien Buemi, remontó desde la undécima posición en parrilla y se colocó cuarto. El Ferrari #50 recibió una sanción por ‘unsafe release’ y perdió posiciones.
El Ferrari #51 tomó la delantera antes de la segunda hora de carrera. La lluvia apareció brevemente, afectando a algunos coches. Más adelante, el Ferrari #83 de Robert Kubica se colocó en primer lugar, seguido por el Porsche #5 y el Ferrari #50.
La lluvia regresó durante la noche, complicando las condiciones de la pista. El Toyota #8 tomó el liderato tras el paso por boxes de Kubica. El coche de seguridad permaneció en pista durante varias horas debido a las malas condiciones climáticas. Al retirarse el safety car, el Toyota #8 lideraba la carrera, seguido por el Porsche #6 y el Ferrari #50.
Pasadas las diez y media de la noche, Kubica arruinó sus posibilidades de victoria al golpear al BMW #15, que tuvo que retirarse, mientras intentaba adelantar a un tráfico lento. A pesar de que el Ferrari #83 resultó ileso y mantuvo el liderato, los comisarios le impusieron más tarde una penalización de ‘stop and go’ de 30 segundos. Esto lo llevó a caer del primer al sexto puesto después de cumplir la sanción en boxes.
El incidente también provocó la salida del primer coche de seguridad de la carrera para recuperar el hypercar afectado y reparar las protecciones, lo que resultó en una neutralización que duró más de 90 minutos. Tras la retirada del ‘safety car’ pasada la medianoche, la lluvia regresó y obligó a varios pilotos, incluidos el Ferrari #83 y el Toyota #8, a hacer una parada en boxes.
Mientras tanto, el Porsche #5 decidió quedarse en pista con gomas lisas, una decisión que finalmente le costó sus opciones de victoria. Finalmente, tras cumplir su penalización en boxes, Kubica cedió el liderato al Toyota #8 a la una de la madrugada, seguido por el Porsche #6 y el Toyota #7 en tercer lugar.
La noche de Le Mans trajo consigo un prolongado período bajo coche de seguridad de más de cuatro horas y media debido a las condiciones climáticas desafiantes. La carrera continuó con intensidad durante las siguientes horas con varios prototipos compitiendo por la victoria en una emocionante batalla en pista.
El Toyota #8 y el Porsche #6 comenzaron a distanciarse del grupo, rodando separados por solo unos segundos y ampliando la brecha con sus perseguidores. A pesar de estar tan cerca, no se materializó un adelantamiento estratégico en las paradas en boxes. En la segunda ronda de paradas, el Porsche 6 se consolidó en el liderato al beneficiarse de un tramo lento en banderas amarillas que retrasó al Toyota 8.
La carrera se vio interrumpida nuevamente a las nueve y media debido a un accidente del Aston Martin #27, lo que permitió que los Ferrari #83 y #50 se reintegraran como líderes tras esta interrupción. Mientras tanto, el Cadillac #2 de Alex Palou lideraba intermitentemente aunque finalmente cayó fuera del Top 5. En la resalida, Kamui Kobayashi presionó a ambos Ferrari para intentar tomar la delantera, pero tuvo problemas mecánicos y fue superado por el otro Toyota.
Posteriormente, el Toyota #8 pasó al Ferrari de Miguel Molina al mediodía con una estrategia más rápida, mientras que el Ferrari #83 quedó rezagado debido a problemas mecánicos en boxes. La lluvia intensa regresó más tarde, afectando la gestión de neumáticos y provocando cambios en la clasificación.
A pesar de una posible infracción, los Ferrari recibieron solo una advertencia. El Toyota #7 tomó la delantera después de que su compañero de boxes sufriera un contratiempo al no poder cerrar su puerta. Se vió obligado a pasar por boxes para acabar con sus opciones de victoria definitivamente. Esto cambió drásticamente la situación en cabeza de carrera, con el Ferrari #50 liderando seguido por el Toyota #7 y el Cadillac #2 en tercera posición.
La carrera se acercaba a su final y a la última ronda paradas en boxes, con todo por decidir. El Ferrari #50 aprovechó la visita a la calle de boxes para repostar, lo que le dio la oportunidad de llegar hasta el final con un solo repostaje más, igualando la estrategia de los demás competidores. En este penúltimo stint, Cadillac colocó a Palou segundo para enfrentar el momento crucial del día. A las tres de la tarde, un giro inesperado ocurrió en la lucha por la victoria cuando ‘Pechito’ López perdió tiempo tras trompear bajo la lluvia con el Toyota #7. Esto significaba que, después de la última parada en boxes, el Ferrari 50 recuperara el liderato.
Molina hizo su parada a sólo 51 minutos del final, y regresó a pista con la incertidumbre de si podría llegar hasta el final. Por otro lado, el Toyota #7 realizó su parada nueve minutos después y repostó a 42 minutos del final para encarar el sprint hacia la meta. Con una ventaja de 41 segundos sobre sus perseguidores, el Ferrari #50 recuperó el liderato con la incógnita de si lograría completar la carrera sin más repostajes. Sin embargo, un error en el cálculo del combustible por parte de Cadillac le costó a Palou perder la sexta posición ante el Porsche #5 debido a un ‘undercut’.
A falta de 18 minutos para el final, Toyota decidió no arriesgar más al comunicarle a López que creían que el Ferrari #50 podría llegar hasta el final sin problemas. Nielsen mantuvo un ritmo conservador ahorrando combustible para cruzar la línea de meta y ganar las 24 Horas de Le Mans.