Esteban Ocon salía ayer de Hockenheim con la mirada baja y en la cabeza las ansias de revancha tras su noveno puesto de ayer en la última vuelta, tras rodar segundo desde la arrancada. La presión de la bomba de combustible falló y el francés tuvo que decir adiós a un podio más que asegurado. Hoy, domingo, en la segunda manga del fin de semana, Ocon arrancaba primero, tras los problemas en la caja de cambios del Van Amersfoort del poleman, Max Verstappen, que le hacían aparcar el monoplaza a un lado de la pista en la vuelta de reconocimiento.
El francés no tenía oposición en los primeros metros y Giovinazzi reconocería tras la carrera que en ningún momento se vio en disposición de adelantar al de Prema Powerteam. Felix Serrlles superaba a Felix Rosenqvist por la cuarta posición, con el sueco muy deslucido en este arranque de temporada y Nicholas Latifi aprovechaba una primera vuelta para olvidar del de Mücke para hacer lo propio. El ritmo de Ocon comenzó a destacarse por encima del resto, con Antonio Giovinazzi exprimiendo al máximo su motor Volkswagen para tratar de dar caza al de Mercedes-Benz.
Edward Jones tenía que emplearse a fondo para defender su tercer puesto frente a un Lucas Auer que -tras arrancar octavo- quería seguir pisando algún cajón del podio tras apuntarse su primera victoria en la categoría en la mañana del sábado alemán. Blomqvist, tras la sanción de última hora que recibió ayer, conseguía remontar hasta la quinta posición después de superar al puertorriqueño Serralles. Pero en la vuelta 20, Michele Beretta seguía sumando votos para erguirse como el fiasco del fin de semana y provocaba la salida del coche de seguridad.
Con sólo una vuelta por delante, Ocon permanecía sin problemas por delante de Giovinazzi y Jones aguantaba el empuje final del austriaco de Mücke para apuntarse el segundo podio del fin de semana. Jake Dennis prolongaba su buena racha tras entrar en al última posición de acceso a puntos, mientras que nuestro Alex Toril debía conformarse con una discreta 19ª posición. Mientras que Antonio Fuoco sufría suerte similar a la de Verstappen y era arrollado cuando marchaba quinto, quedándose fuera en la primera vuelta con al suspensión trasera dañada.