Fernando Alonso vuelve a demostrar su talento al clasificar séptimo en el GP de Singapur, superando las expectativas con un Aston Martin que no apuntaba a llegar a la Q3. El piloto español parte desde la zona limpia y confía en adelantar a Hülkenberg en la primera curva. Aunque el AMR24 no estaba destinado a un buen rendimiento en Marina Bay, Alonso ve "posibilidades reales" de pelear por un sexto puesto.
El asturiano reconoció tras la clasificación que no esperaba este resultado. “Ha sido una sesión difícil, y este circuito saca todas nuestras debilidades en el coche: falta de tracción, giro limitado en las curvas lentas y poca estabilidad en frenada. Estábamos muy lejos de ser competitivos”, explica Alonso ante los micrófonos de DAZN F1. Sin embargo, como suele hacer, ha sacado el máximo partido a su monoplaza, logrando un giro impecable en la Q3 que le permitió finalizar en séptima posición, algo que ni él mismo cree que se repetiría en condiciones normales.
Alonso admite que se plantearon asegurar un noveno puesto para evitar la zona sucia de la parrilla, pero finalmente logró colocarse séptimo, lo cual considera un golpe de suerte. "Repetimos esta clasificación 200 veces y en 199 no acabo séptimo", bromeó el bicampeón, quien intentará aprovechar su posición para sumar puntos en la carrera del domingo.
De cara a la carrera, Alonso es consciente de que su coche está fuera de posición, pero confía en una buena salida. Aunque reconoce que Ferrari debería estar por delante, el español sueña con adelantar al Haas de Hülkenberg en los primeros metros y maximizar las oportunidades de su Aston Martin.