Después de la sensacional actuación del español en la carrera de casa para Ferrari, el piloto aterriza motivado y preparado para el complicado fin de semana de Marina Bay.
Para él, esta es de las citas más exigentes del año, no solo es un circuito urbano donde los muros están cerca, sino que la humedad y el sentido antihorario de la pista son dos factores que suponen una dificultad añadida. En definitiva, este escenario supondrá un verdadero reto para los pilotos.
"Cuando empecé a entrenar en enero y febrero, nunca pensé en la primera carrera de la temporada, esta es una porque te enfrentas a las condiciones más duras. Hay otras carreras con temperaturas muy altas, pero la humedad es sofocante aquí y combinado con una pista antihoraria es agotador para el cuello. No solo es física, también es mentalmente exigente".