En el Gran Premio de Mónaco del pasado fin de semana -Mercedes a parte- hubo un ganador especial. Jules Bianchi lograba llevar su MR03 a meta en la octava posición, tras completar una carrera de resistencia contra los accidentes y los problemas mecánicos que sucedían a su alrededor. Además, el francés de la Ferrari Driver Academy tuvo que pasar por boxes para cumplir una sanción por situarse erróneamente en la parrilla de salida pero lo hizo bajo Safety Car y Charlie Whiting le impuso otros cinco segundos extra en su tiempo tras la bandera a cuadros.
Así, la posición oficial que figurará en los anales de la historia de Marussia F1 Team será un noveno lugar que otorgaba los primeros dos puntos desde que el equipo anglo ruso irrumpiera en la categoría en 2011 sustituyendo a Virgin Racing. El delirio en el box de Marussia era indescriptible. Los abrazos se repetían y la sonrisa de todos los componentes era la tónica habitual.
Los enhorabuenas no tardaron en llegar. Desde Fernando Alonso hasta Christian Horner -pasando por Toto Wolff- reconocieron el mérito enorme de una dupla Bianchi-Marussia que hizo creer en lo imposible sobre las calles de Montecarlo. La clasificación de Constructores refleja una novena posición -por delante de Sauber y Caterham- que en los sueños se mantendría hasta final de Campeonato. Por ello trabajarán de sol a sombra y para ello exprimirá todo su potencial el joven Jules Bianchi.
No nos hemos cansado de repetirlo, pero el francés de 24 años tiene un gran futuro por delante y si en 2013 dio muestras de su calidad, lo de este fin de semana es una confirmación de que en 2015 debe dar ese salto cualitativo a un equipo de mitad alta de tabla.
\"Fue como una victoria para mí. A pesar de que eso no signifique mucho para los demás, para nosotros este noveno puesto es como un triunfo”, declaraba el piloto francés tras la carrera. ”Solo puede ayudar pero, para el futuro, tendremos que ver cómo progresa la temporada. Me siento preparado para ir a un equipo grande”.
\"A menudo se comenta que Mónaco es un circuito de pilotos. Sí, se benefició de lo que pasó en la carrera pero, cuando observas sus tiempos por vuelta, ves que tuvo ritmo. Mi trabajo ahora es tratar de subirme a este tren, porque no suelen pasar cada día\", añadía su manager, Nicholas Todt, a ‘BFMTV’.
Los próximos meses dirán, pero, por el momento, su manager comienza a mover influencias. Jules Bianchi ha demostrado su madurez y su sólido trabajo con Marussia. Es el momento de seguir hacia delante.