Fernando Alonso demostró su experiencia y determinación en la clasificación del Gran Premio de Qatar, logrando un rendimiento inesperado en la Q3. Este resultado llega tras varias carreras complicadas para Aston Martin, que sufrió un retroceso en el desarrollo del monoplaza desde el Gran Premio de Estados Unidos. A pesar de estos contratiempos, Alonso reafirmó su confianza en sí mismo y en su capacidad de extraer el máximo del coche.
El asturiano, que llegó a estar en peligro de quedar detrás de equipos como Sauber en el campeonato, destacó que el problema radicaba más en el coche que en su conducción. "Cuando no somos competitivos y luchamos por la Q1, no es que me haya vuelto lento de un día para otro", explicó Alonso, quien insistió en que los resultados dependen de las prestaciones del monoplaza.
Aston Martin sorprendió en Losail al mostrar un mejor ritmo en clasificación, aunque Alonso admitió que el equipo aún no entiende del todo las razones. Señaló que el coche respondió mejor a los neumáticos blandos y que los ajustes tras la carrera sprint contribuyeron a mejorar el rendimiento general del AMR24.
Con este inesperado rendimiento, Alonso envió un mensaje de optimismo tanto al equipo como a sus seguidores, recordando que las dificultades recientes no han mermado su confianza ni su capacidad de competir al más alto nivel.