Desde la llegada de Flavio Briatore como asesor ejecutivo de Alpine, el equipo de Fórmula 1 ha vivido una importante reestructuración en su sede de Enstone, que ha resultado en la salida de aproximadamente 300 empleados. Según Briatore, el objetivo de este proceso es centrar todo el esfuerzo en el proyecto de 2025, con la vista puesta en mejorar el rendimiento en la que será la última temporada de la escudería francesa junto a Renault como proveedor de motores.
En declaraciones recientes, Briatore explicó que, al asumir su rol, buscó optimizar los recursos y reducir el equipo de 1.150 a 850 empleados, una medida pensada para asegurar una alineación enfocada exclusivamente en el éxito en pista. El asesor considera que este ajuste permitirá a Alpine afrontar la próxima temporada con una estructura más compacta y eficiente, preparada para competir al más alto nivel.
El pasado fin de semana, Alpine logró un sorprendente segundo y tercer puesto en el Gran Premio de Brasil con Esteban Ocon y Pierre Gasly. Sin embargo, Briatore aclaró que, aunque el esfuerzo de los pilotos fue clave, el resultado se debió en parte a las condiciones climáticas y la bandera roja, que igualaron el rendimiento en la pista mojada. “Fue una gran actuación, pero no refleja del todo el estado actual del equipo”, admitió.
Para el asesor ejecutivo, la experiencia sigue siendo crucial en la Fórmula 1. A modo de ejemplo, señaló los errores cometidos en Brasil por jóvenes pilotos como Oliver Bearman y Franco Colapinto, lo cual considera una prueba de que en la categoría reina del automovilismo, la madurez en pista es aún un factor determinante para lograr el éxito.