Los datos no engañan: el bajón de Lewis Hamilton es un hecho. El heptacampeón del mundo todavía no ha logrado subir al podio en lo que va de temporada y, si no revierte la situación en las siete carreras restantes, podría cerrar el año más gris de su carrera. Desde su debut en 2007, Hamilton siempre había sumado al menos cinco podios por curso, incluso en sus campañas más difíciles como 2009, 2013 o 2024. En 2025, sin embargo, el británico sigue en blanco.
La llegada de Hamilton a Ferrari despertó una enorme expectación. El fichaje del piloto más laureado de la parrilla tenía un objetivo claro: conquistar el ansiado octavo título y superar a Michael Schumacher. Aunque se asumía que este primer año sería de adaptación antes del gran cambio reglamentario de 2026, la paciencia en Maranello empieza a agotarse. El SF-25 no ha respondido como se esperaba y la falta de resultados alimenta las dudas sobre la capacidad del equipo para darle a su estrella un coche ganador.
Las estadísticas reflejan el golpe. Entre 2014 y 2021, Hamilton promedió entre 13 y 17 podios por temporada, y en sus peores años nunca bajó de cinco. Hoy, en cambio, está completamente fuera de la lucha por las posiciones de honor. Charles Leclerc, con cinco podios, ha salvado en parte el honor de Ferrari, pero el contraste con el británico es evidente. El propio Lewis admite que su adaptación al coche y a la estructura de Ferrari está siendo más complicada de lo previsto.
El escenario en el campeonato tampoco ayuda. Ferrari ocupa actualmente el tercer puesto en Constructores con 286 puntos, por detrás de Mercedes (290) y con Red Bull acechando desde la cuarta posición con 272. El subcampeonato es el único objetivo realista que queda, tanto por los beneficios económicos que reporta como por el impulso moral que supondría. Sin embargo, las últimas victorias de Max Verstappen amenazan con poner en peligro incluso esa meta.
Hamilton, pese a todo, se mantiene firme. Su mirada está puesta en 2026, año en el que entrará en vigor el nuevo reglamento técnico que promete barajar las cartas de la Fórmula 1. “Este año es un aprendizaje. Lo importante es estar preparado para lo que viene”, ha repetido en varias entrevistas. Pero el tiempo apremia: si no logra reaccionar, el siete veces campeón podría cerrar su primera temporada con Ferrari sin una sola visita al podio, un registro que mancharía su brillante trayectoria.