La Fórmula 1 se prepara para otro gran cambio de reglamentación en 2026, cuando las unidades de potencia repartirán su energía al cincuenta por ciento entre el motor de combustión interna y los componentes eléctricos. Este "reseteo", similar al que ocurrió en 2014, podría volver a situar a Mercedes en una posición dominante, según ha expresado James Vowles, director del equipo Williams, en el podcast oficial de la F1 Beyond the Grid.
"Creo que Mercedes ha hecho un trabajo excepcional, y por eso me alegré mucho cuando firmamos la ampliación de contrato con ellos", declaró Vowles. "Veremos diferencias significativas entre las unidades de potencia en 2026, mientras que hoy en día son casi todas iguales".
Vowles aclaró que, aunque espera que Mercedes esté en ventaja, no cree que la diferencia sea tan pronunciada como en 2014, cuando el equipo alemán arrolló a sus competidores gracias a una unidad de potencia muy superior. Según el jefe de Williams, la clave está en que Mercedes comenzó a invertir en tecnologías diferentes y más temprano que sus rivales, lo que les ha dado un margen para explorar innovaciones en el desarrollo del motor de combustión interna.
El cambio normativo también incluirá el uso de combustibles sostenibles, que serán otro factor a tener en cuenta. Sin embargo, Vowles considera que su impacto no será tan determinante como el de las nuevas unidades de potencia. "El combustible sostenible es una idea brillante, pero no será el factor más importante en cuanto a rendimiento", añadió.
A pesar de las incógnitas que rodean el reglamento de 2026, Williams se prepara con optimismo para esa nueva era, en la que contará con Carlos Sainz en sus filas.