Esta pasada semana sonó el timbre en el domicilio de Kimi Raikkonen en Suiza. Tras abrir la puerta, el piloto finlandés de Alfa Romeo Racing escuchó cómo un mensajero le informaba de que le traía un ‘paquete’ un poco grande. Por ello, el operario solicitó la ayuda de ‘Ice man’ para poder abrir… el contenedor allí depositado.
La sorpresa del corredor nacido en Espoo fue absoluta al comprobar que en su interior se encontraba ni más ni menos que un monoplaza rojo. Se trataba del Ferrari SF71H que condujo en su última y vigesimoprimera victoria en la Fórmula 1. Ésta tuvo lugar en el Gran Premio de Estados Unidos 2018, disputado en el texano Circuito de las Américas.
De este modo tan especial ha querido la formación de Maranello agradecer y reconocer el espectacular triunfo del '7' en el trazado de Austin. Es un bonito gesto que la firma del 'Cavallino Rampante' con el corredor que se mantiene como el último Campeón del Mundo para la legendaria formación… en 2007.
Obviamente, el nórdico se mostró encantado con la sorpresa proveniente de Italia y no tardó nada de tiempo en hacerle un hueco en su garaje. Allí descansan infinidad de motocicletas con las que suele practicar motocross en una pista de tierra próxima a su casa helvética, así como algunas joyas de cuatro ruedas. Poco después de recibir el presente, se encargó de publicar la noticia en sus redes sociales que acompaña con un par de imágenes.
Thank you @ScuderiaFerrari pic.twitter.com/T1LfSvkehO
— kimi Raikkonen (@RaikkonenOficia) May 30, 2020