El adelantamiento de Norris a Fernando Alonso en la primera vuelta fue clave para escalar al quinto puesto y convertirse en el nuevo líder de la zona media. Aunque el español quería recuperar su posición de salida, la mayor amenaza para ambos venía por detrás y se llamaba Max Verstappen. El neerlandés venía a gran velocidad, pero la defensa del piloto de Alpine dio alas al primero de los McLaren para que tuviera un pequeño margen sobre sus perseguidores.
En el momento que Alonso abandonó por el fallo de fiabilidad, el vigente campeón del mundo fue la prolongación del británico hasta la salida del segundo coche de seguridad. Este había entrado en escena en el momento perfecto para Norris, ya que pudo aprovechar este periodo para perder menos tiempo en el cambio de ruedas y se reincorporó a la pista por detrás de Pérez y ambos Ferrari. Al final del día, todo salió perfecto para Lando y su recompensa fue el cuarto puesto, siendo su segundo mejor resultado del año (el mejor fue la tercera posición en Imola). Gracias a que ambos MCL36 terminaron entre los cinco mejores, McLaren supera a Alpine en el mundial por cuatro puntos.
"Un muy buen día, con ambos coches en el Top 5. Fue una carrera dura, especialmente por las condiciones, pero todo el equipo hizo un trabajo fantástico. Sumamos muchos puntos, lo cual era muy importante para el campeonato de constructores. Estoy muy feliz", concluye el británico en declaraciones recogidas de la página de McLaren.