Al estar tan bien posicionado en la parrilla, el heptacampeón del mundo no estuvo concentrado en defender la cuarta plaza, estuvo con el punto de mira en los pilotos de delante para intentar aspirar al podio. Sus primeros metros habían sido claramente mejores que los de Sergio Pérez, lo que le sirvió para superar al mexicano por el interior de la curva 1. Este adelantamiento fue clave, pero defender la tercera plaza de un Red Bull también fue un mérito enorme.
Con la posterior retirada de Charles Leclerc, Hamilton escaló a la segunda plaza, la cual supo conservar perfectamente hasta la bandera a cuadros. Subir al segundo escalón del podio ha sido la mejor manera posible de celebrar sus 300 Grandes Premios en Fórmula 1 y se marcha de Paul Ricard con una sonrisa. La fiabilidad y la consistencia son los principales puntos fuertes de Mercedes en esta temporada y, gracias al resultado de Lewis y George Russell, la escudería de Brackley recorta distancia a Ferrari en constructores. El margen entre ambos es de 44 puntos a día de hoy.
"Qué gran resultado, considerando que hemos estado lejos durante todo el fin de semana y me he perdido los Libres 1. No esperaba luchar por el segundo puesto o por el podio, este es un resultado maravilloso para nosotros. No tenemos el mismo ritmo que los dos equipos de delante todavía, pero fuimos capaces de mantener a uno de ellos bajo control, por lo que es un resultado asombroso. Enhorabuena al equipo que está en las fábricas y al que estuvo aquí, sin ellos no hubiera sido posible, estoy orgulloso de ellos", finaliza el británico en el comunicado post carrera de Mercedes AMG F1.