Nico Rosberg ganó el Mundial de Pilotos de la Formula 1 en 2016 y decidió retirarse al final de esa temporada tras una dura batalla con Lewis Hamilton en la que saltaron chispas en más de una ocasión. El alemán tardó tres temporadas en ganarle a su compañero de escudería, pero una vez realizada la hazaña, decidió abandonar la competición, una decisión que sorprendió a todo el mundo: aficionados, pilotos, equipos, la organización...
El alemán no terminó su contrato con Mercedes y tras rescindir con la marca de la estrella dejó de ganar 100 millones de dólares. Rosberg reconoció que no le importaba el dinero, prefería estar con su familia. "Quería evitar ser un piloto del pasado o un piloto al que ya nadie lo quiere en su equipo. Había 100 millones de dólares sobre la mesa a los que renuncié. Quería una vida diferente, no tienes una vida flexible cuando estás compitiendo. Fue la mejor decisión para mi familia, no pensé en el dinero ni un solo segundo".
Rosberg explicó una vivencia de ese año donde en Silverstone vió a dos padres pidiendo a sus hijas de cuatro años que lo abuchearán. "Había dos bandos: uno era el de Nico y otro el de Lewis. Todos los aficionados de Lewis estaban en mi contra, está claro. Una vez vi a dos niñas de cuatro años con sus padres y me estaban abucheando y con el pulgar hacia abajo. Los padres les decían que yo era el malo y que tenían que abuchearme"