Después de una actuación sensacional en el pasado Gran Premio de Estados Unidos, caer eliminado en la Q1 de México ha sido un varapalo bastante duro para el alemán. Las sensaciones no eran positivas en los últimos entrenamientos, pero tenía la esperanza de que todo mejorara en la clasificación.
Desde el primer momento se comprobó que el AMR22 no era competitivo, ni en el primer intento ni en el último, no había nada que hacer para alcanzar la Q2. Por si no fuera suficiente, los dos pilotos de Aston Martin cayeron en esta primera ronda.
"Las cosas no parecían muy alentadoras en los libres 3, esperábamos dar un paso adelante en la clasificación, pero no fue el caso. Sufrimos con el agarre y el equilibrio general del coche y no funcionaba en ciertas curvas. Siempre soy optimista para que podamos hacer algo especial en la carrera", finaliza el campeón del mundo.