En su año de debut en F2, el principal punto débil del piloto danés había sido el ritmo de clasificación, lo que le había lastrado de tal manera que terminó fuera de los puntos en la mitad de las carreras disputadas. Sin embargo, cuando lograba situarse en las primeras cinco filas de la parrilla, solía mantenerse en el top 10 e incluso mejoraba su puesto de salida.
Sus mejores actuaciones habían tenido lugar en Bakú, donde consiguió el primer y único triunfo de la temporada, en los trazados de España, Reino Unido, Francia, Hungría e Italia acabó en el top 5 y en tres oportunidades subió al podio. A pesar de los numerosos ceros, Vesti superó la barrera de los 100 puntos y finalizó noveno en la general.
Después de su primer año en la categoría de plata, Mercedes ha confirmado que Vesti continuará dentro de su academia en esta nueva temporada de competición. Toto Wolff, director ejecutivo de Mercedes, tiene altas expectativas con el joven en 2023: "Después de probar el F1 (el W13) en los test de Abu Dabi del año pasado, esperamos que Frederik luche por victorias y esté en la lucha por el título de FIA F2".