Pepe Martí cierra un fin de semana complicado en Imola, donde la fortuna no acompañó al piloto de Campos Racing pese a mostrar un ritmo competitivo durante el Gran Premio, que ha supuesto la cuarta cita del campeonato de Fórmula 2.
El viernes, Pepe arrancó con buenas sensaciones en los entrenamientos libres, pero la clasificación no le permitió avanzar como esperaba. Cuando se disponía a buscar un registro que le metiera en el top 10, una bandera roja interrumpió la sesión antes de tiempo y le dejó en la 11ª posición: “Ha sido un fin de semana complicado. Empezamos bien en el entrenamiento libre, teníamos un buen ritmo y me sentí cómodo. En la qualy, en el primer set no teníamos mucha confianza. En el segundo set, cuando podríamos haber dado un paso adelante para estar en el top 10, la sesión se terminó antes de tiempo por una bandera roja. El hecho de que los horarios estén tan apretados obligó a darla por finalizada. Una pena, porque es algo ajeno a nosotros y nos comprometió el fin de semana al 100%”, explica el piloto.
La carrera Sprint del sábado tampoco trajo recompensa. Martí fue perjudicado en la salida por un piloto que arrancó mal delante de él y después se vio empujado fuera de pista. Aunque el ritmo de carrera fue sólido, el daño inicial limitó cualquier opción de remontada.“Tuvimos mucha mala suerte. El coche de delante salió mal y me comprometió los primeros metros. Además después me echaron de pista. Cuando empiezas con mal pie y fuera de posición, es difícil progresar”, resume.
El domingo, en la carrera principal, el español optó por una estrategia distinta y llegó a liderar brevemente la prueba tras una buena gestión inicial. Sin embargo, la aparición del safety car en la vuelta 15 truncó sus planes. “Hemos hecho una salida regular, pero luego remontamos y nos colocamos líderes por la estrategia inversa. Lo último que pedía era un safety car en la vuelta 15… y es justo lo que pasó”, lamenta.
A pesar del resultado final (14º), Pepe se quedó con buenas sensaciones: “Me voy con la cabeza bien alta porque la velocidad estaba. En las últimas cinco vueltas, con el neumático blando, fuimos de largo los más rápidos de la pista. Nos llevamos esto a Mónaco con mucha confianza, sobre todo para la clasificación, que allí es aún más clave”.
El piloto del Red Bull Junior Team concluye el fin de semana con la mirada ya puesta en la siguiente cita del campeonato, un trazado urbano donde la clasificación cobra aún más importancia y donde ya brilló en 2023. Además, sale de Imola ocupando la sexta posición de la clasificación general con un total de 41 puntos