James Hinchcliffe abandona el Healt Methodist Hospital de Indianápolis para continuar con la recuperación en casa. El piloto canadiense sufrió un aparatoso accidente en los entrenamientos libres del Lunes 18, entrenamientos posteriores a la sesión de clasificación de las 500 millas de Indianápolis.
Hinchcliffe tuvo que ser operado de urgencia cuando una pieza de la suspensión le atravesó la pierna seccionándole una arteria. También ha tenido que tratarse una lesión en la pelvis. Aunque James ha sido dado de alta en el hospital, no está ni mucho menos recuperado para volver a la competición, de hecho, abandonó el hospital en silla de ruedas, empujado por el actual campeón de la Indycar, Will Power, y con sus siempre muestras de buen humor.
La Indycar tendrá que realizar exámenes posteriores para evaluar cuando Hinchcliffe puede volver a competir. De momento, su lugar en la próxima prueba doble de Detroit será ocupado por Conor Daly, como posible compensación de Honda tras explotar el motor del estadounidense antes de la salida de las 500 millas de Indianápolis.