En el turno de Oscar Piastri no hubo demasiados contratiempos como sí había pasado en el caso de su compañero, Lando Norris. El australiano estuvo concentrado en adaptarse al monoplaza con el que debutará en Fórmula 1 y en completar todos los puntos del programa de trabajo, cuyos objetivos ha cumplido a la perfección.
Eso sí, debido a su escasa experiencia al volante de estos monoplazas de la nueva normativa, la curva de aprendizaje será pronunciada a medida que pasen los días de entrenamientos y tiene mucho margen de mejora. Su siguiente oportunidad al volante será el viernes por la tarde.
"Mi primera mañana de test fue bastante tranquila, lo cual es un buen buen comienzo de temporada. Completamos el programa que queríamos con el enfoque de que alcanzara el ritmo y acostumbrarme a la nueva generación de coches de F1. Hay mucho por aprender y mejoras que hacer. Tengo ganas de mis próximas sesiones para seguir mejorando y aprendiendo más sobre el coche", sentencia el australiano en el comunicado de McLaren.