Aleix Espargaró arrancaba su segundo curso en Aprilia con el firme propósito de pelear regularmente dentro del top 10. Sin embargo, transcurridas siete carreras la realidad de los Noale es muy diferente. La actual RS-GP adolece problemas de rendimiento y fiabilidad, lo que unido al poco acierto de sus pilotos se ha traducido en que Espargaró y Redding solo hayan puntuado en cinco ocasiones.
"Este año estamos sufriendo", reconoce Aleix, que acabó la jornada del viernes 13º a nueve décimas de Viñales. "Tenemos que replantearnos nuestros objetivos. Soy súper ambicioso y siempre digo que quiero meterme en el podio y pelear por eso, pero la realidad es otra. No estamos cerca. Tenemos que mejorar la moto. Quizás me tenga que relajar un poco, dar un paso atrás, tratar de acabar carreras, acabar en el top 10. Quizás tenemos que crecer un poco más lentamente, paso a paso".
No obstante, el piloto de Granollers (Barcelona), defiende la moto y el trabajo del fabricante transalpino, señalando que es en los detalles donde deben trabajar.
"Creo que la Aprilia es una buena moto en la última parte de la carrera. El problema es que se ha parado en tres carreras y yo me caí en otra. Nos falta mucho en curva. Estoy sufriendo mucho este año con el neumático delantero. Quizás son muchos pequeños detalles que no nos están permitiendo progresar. Hay que mejorar la moto lo antes posible. No estamos preparados para luchar por el top 6, que es lo que me gustaría".