Yamaha terminaba el domingo con la racha más larga de la historia del equipo japonés sin conocer la victoria, 29 carreras después llegó el triunfo de Viñales. Lin Jarvis, dirigente de Yamaha, quiso mostrar sus sensaciones tras la victoria y dar detalles sobre cómo se había vivido todo esto desde su posición. La primera impresión que dio es la de una persona aliviada tras unos resultados fatídicos en este último año.
"Ni me acuerdo de lo que se siente al ganar una carrera. Ha pasado mucho tiempo. Obviamente, es fantástico. En cada gran premio, los periodistas nos lo recordaban: 23 sin victorias, 24, 25... Ahora es un 'reset' (reinicio). Y esa es la palabra más importante del día. Esto tiene que ser el inicio de un 'reset' en Yamaha. Ya hemos hecho planes sobre nuestra planificación para 2019 para reorganizarnos, para salir de este, digamos, bache. Esta victoria hará crecer nuestra motivación. Ahora podemos saber de nuevo lo que se siente al ganar. Creo que será un gran impulso para Yamaha, no para relajarnos en absoluto, pero sí una clara motivación porque esto es lo que queremos: ganar de nuevo, lograr más victoria el próximo año y, esperemos, el Mundial".
"Obviamente, a nivel interno, tuvimos muchas negociaciones. Ya tenemos algunas ideas, pero que necesitan ser cristalizadas. Sin duda, habrá cambios en la organización. Si dejáramos todo igual, probablemente, no saldríamos del bache. Así que seguro que los habrá y se verán claros antes de 2019. No creo que sea el motor, completamente. El tema es el pilotaje, la aceleración, la tracción. Vi varias veces en la carrera que Valentino llegaba primero a la recta, pero acababa cuarto".