El Gran Premio de Tailandia fue un fin de semana complicado para Marc Márquez, quien llegó tras una victoria en Australia con grandes expectativas. Sin embargo, su carrera se torció rápidamente cuando, tras una caída en la que intentó realizar una de sus habituales salvadas con la Ducati, se vio obligado a abandonar su posición en el podio.
A pesar de rodar segundo detrás de Bagnaia, el español perdió el control al tocar un piano y terminó en el suelo. Aunque logró regresar a la pista, lo que generó controversia fue que su mono se abrió durante la caída, lo que significa que compitió con la cremallera parcialmente desabrochada. Según el reglamento de MotoGP, todos los pilotos deben llevar el equipo de seguridad completo y correctamente abrochado. Este detalle podría haberle acarreado una sanción, ya que, como establece la normativa, cualquier incumplimiento puede resultar en penalizaciones.
Históricamente, el reglamento ha sido estricto en cuanto a las condiciones del equipo de seguridad. Por ejemplo, en el GP de Cataluña de 2021, Fabio Quartararo fue sancionado por no llevar sus protecciones adecuadamente ajustadas, lo que pone de relieve la seriedad con la que se manejan estas normas. En el caso de Márquez, su mono no estaba completamente abierto, pero la normativa es clara y su situación plantea dudas sobre la aplicación equitativa de las sanciones.
Mientras que algunos pilotos, como Jorge Martín, se beneficiaron de sus errores, la falta de sanción para Márquez generó críticas sobre la imparcialidad de los comisarios. Enea Bastianini, tras la carrera, expresó su descontento por la actuación de Márquez al adelantar rápidamente a Nakagami para cumplir con una sanción por un toque con Joan Mir. Bastianini argumentó que este tipo de maniobras podría sentar un precedente peligroso para el futuro de la competición.
El incidente de Márquez destaca la necesidad de una mayor consistencia en la aplicación de las normas de seguridad en MotoGP, especialmente en momentos críticos como este. Mientras se prepara para la próxima carrera en Valencia, el piloto del Gresini Racing se enfrenta no solo a los desafíos en pista, sino también a las implicaciones de su actuación en Tailandia.