Con 39 años a la espaldas, un nuevo podio en el Gran Premio de Catalunya no debería saber a poco, pero si te llamas Valentino Rossi y has ganado en este circuito en nueve ocasiones tal vez sí. Más aún cuando no vences hace casi un año y en las últimas tres carreras solo has podido ser tercero.
El italiano está ahí sin estar. Marcha segundo del campeonato, a 28 puntos del líder, Márquez, más por deméritos ajenos que por méritos propios. El próximo día 25 se cumplirá un año de su última victoria, en Assen, aunque tras no haber sufrido el descalabro que sufrió el pasado curso en este escenario Yamaha, el de Tavullia confía en volver a ser competitivo en el circuito donde más veces ha ganado.
"Cuarto podio de la temporada, pero siempre tercero", resumió resignado Rossi. "Eso significa que aún nos falta un poco. Que la última victoria de Yamaha fuese en Assen es una mala noticia. Teóricamente, si tenemos en cuenta cómo fueron las cosas aquí hace un año y cómo han ido esta vez, y que entonces ganamos en Assen, pues sí, deberíamos pelear por ganar allí. Pero estos cálculos no son tan fáciles de que se cumplan en el motociclismo".
El #46 se 'encontró' el podio después de que Dovizioso se fuese al suelo, si bien tuvo que superar a la Honda de Pedrosa al inicio. Rossi no dudó en reconocer la superioridad de los pilotos que quedaron por delante.
"En los libres vi que las dos Ducati y Márquez tenían un poco más que nosotros. Me ha faltado un poco en los primeros giros, pero si tenemos en cuenta lo mal que lo pasamos el año pasado, es para estar contentos".
Tras haber mandado mensajes a Yamaha instándole a ponerse las pilas, Rossi asegura que están dando pasos adelante, si bien aún les queda.
"Esta mañana modificamos un poco la moto y dimos un pequeño paso que me hizo acercarme a los de delante y tomar ventaja con los de detrás. Estamos haciendo un gran trabajo pero aún lo podemos hacer mejor", zanjó.