Manor se debate entre introducir o no el monoplaza de 2015. La escudería decidirá durante las próximas semanas si es viable estrenar el nuevo coche tras el parón de verano, después de haber disputado las primeras carreras con el bólido de 2014 adaptado a la normativa de este año.
Con el monoplaza actual, tanto Roberto Merhi como Will Stevens se han mantenido regularmente dentro del límite del 107%. Por esta razón, sumada a los costes potenciales del nuevo bólido, el equipo podría mantener el coche de 2014 hasta el final de temporada para centrarse de cara a dar un salto en 2016.
“Creo que durante las próximas semanas se tomarán algunas decisiones importantes”, declaró Graeme Lowdon a Motorsport.com. “Ahora está todo más claro en relación a contra quiénes estamos compitiendo y lo que necesitamos hacer”. La decisión estaría en manos de los nuevos fichajes de Manor, como el exdirector técnico de Mercedes Bob Bell. “Estamos incorporando todo el tiempo a gente que tendrá voz a la hora de tomar la decisión. No tiene sentido contratar a estas personas y decirles que este es el plan”, afirmó Lowdon.