La siempre competida clase LMP2 ha vuelto a dejar huella en las 24 Horas de Le Mans tras una igualada edición donde un equipo "outsider" ha sorprendido llevándose la victoria. Con equipos como United Autosport, WRT, Prema o Signatech-Alpine como claros candidatos a la victoria, el modesto equipo polaco Inter Europol ha terminado llevándose un triunfo donde el español Albert Costa ha sido protagonista.
El Inter Europol comenzó la carrera remontando tras partir desde la novena posición, pasando de la séptimo lugar al segundo en un fantástico relevo de Albert Costa en la tarde del sábado. Tras consolidarse en las posiciones cabeceras, el equipo formado por Costa, Smiechowski y Scherer ascendió al liderato durante la noche, y tras aguantar al WRT #41 durante gran parte de la carrera a la zaga, pudieron sellar un magnífico triunfo final a bordo del #34.
Destacar que Scherer fue el piloto encargado de cerrar la carrera, todo ello tras reponerse de un atropello en zona de boxes, donde el Chevrolet Corvette #33, ganador de la categoría GTE Am, le pasó por encima del pie y le dejó renqueante durante el resto de carrera. Sobreponiéndose al atropello, el Inter Europol tuvo que sobrevivir a los problemas de radio y de una de las puertas en la fase final de la prueba, lo que le otorgó un cierto prisma catastrófico que finalmente quedó en anécdota.
Con este triunfo, Albert Costa se confirma como uno de los grandes pilotos de resistencia del mundo, colocándose como claro candidato a optar por un buen puesto en la futura clase GT3 del WEC o, porque no, llegar a formar parte de la alineación en alguno de los Hypercar.