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El equipo Ford Chip Ganassi logró el pasado diecinueve de junio alzarse con la victoria en las 24 Horas de Le Mans dentro de la categoría GTE Pro con el nuevo Ford GT, después de poco más de un año de desarrollo del nuevo bólido de competición. Sébastien Bourdais, Joey Hand y Dirk Müller, a bordo del GT número 68, lograron batir al Ferrari 488 GTE número 82 de Giancarlo Fisichella, Toni Vilander y Matteo Malucelli por apenas diez segundos, mientras que el Ford GT número 69 de Ryan Briscoe, Scott Dixon y Richard Westbrook completó el podio en un retorno exitoso para la marca del óvalo a la carrera de resistencia por antonomasia.
El segundo de los cuatro GT desplegados en Le Mans, el número 67 de Harry Tincknell, Andy Priaulx y Marino Franchitti, tuvo que entrar en boxes justo antes de la salida con problemas mientras que en GTE Pro el Porsche 911 número 91 de Nick Tandy (ganador absoluto con Earl Bamber y Nico Hulkenberg en 2015 en el 919 Hybrid), Patrick Pilet y Kevin Estre se colocaba en cabeza. Una vez entró en boxes su el Porsche número 92 se colocó en cabeza mientras Porsche, Chevrolet con el Corvette número 64 y el Ferrari número 82 se enfrentaban al mismo tiempo.
A las dos horas de cabeza Westbrook adelantaba al Porsche número 92 (pilotado en esos momentos por Fred Mackowiecki) para ponerse primero, deteniéndose los líderes una hora después de modo que el GT número 68 se colocaba primero – una vez este paró en boxes, el 68 y el 69 se enzarzaron en una pelea por la segunda posición por detrás del Ferrari número 82 – el Ford número 66 también se introdujo en la pelea por la victoria, rodando tercero entre Hand y Bamber.
A las 19:39 el Ford número 68 se colocaba primero y poco después el número 69 segundo tras adelantar ambos al Ferrari 488 GTE oficial – no obstante, la lucha entre Ford y Ferrari, que ya fue parte de la historia de la carrera en la década de los sesenta, volvió a tener lugar una vez más. Las posiciones se mantuvieron durante la caída de la noche hasta que el Porsche número 91 rompió el motor en torno a la una de la madrugada, provocando la salida del Safety Car. Minutos después, el Ford GT número 66 entraba para arreglar las luces laterales cuando rodaba quinto a la vez que el número 68 paraba en boxes durante unos minutos con problemas mecánicos. Pasadas las dos de la madrugada el número 69 peleaba mano a mano con el Ferrari número 82, parando ambos coches en boxes y cambiando de pilotos mientras Porsche también perdía al 911 número 92.
Ya acercándose a las cinco de la mañana (y por tanto pasado el ecuador de la prueba) el Ford número 69, con Briscoe al volante, se veía obligado a detenerse en su garaje cuando rodaba segundo por detrás de su rival italiano. Quince minutos después sería el Ferrari el que entrase en boxes y se encontrase con problemas en su parada – volvería a salir a pista en cabeza, pero con el número 68 persiguiéndole de cerca. Eran casi las siete, en pleno amanecer, cuando el Corvette número 64 tenía un fuerte golpe de frente contra las protecciones de la curva Dunlop.
Antonio García, cuyo Corvette número 63 se vio obligado a salir al fondo de la parrilla por una penalización, estuvo remontando posiciones a lo largo de toda la carrera, aunque seguía noveno (beneficiado por los diversos abandonos) a la llegada de la mañana. El ritmo tan competitivo de la categoría le impedía remontar más puestos pese a que el veterano español (que cuenta con un gran palmarés en la categoría) formaba equipo con Ricky Taylor y Jan Magnussen.
A las 8:37 al Ford número 68 le caía un Drive Through mientras continuaba la pelea con el Ferrari número 82 – pese a ello seguía segundo, por delante del Ford número 69, el Aston Martin Vantage GTE número 95 pilotado por Marco Sorensen y el Ford número 66. Una vez volvió a pista fue capaz de recortarle segundos sin descanso durante la siguiente hora y media, llegando a colocarse a tres segundos pasadas las diez de la mañana.
El adelantamiento llegaría media hora más tarde, con Hand adelantando a Malucelli en la recta de Mulsanne. Más tarde Vilander tomaría el relevo y atacaría a Hand, pero el norteamericano – que hasta la pasada temporada competía con BMW en el Campeonato Alemán de Turismos – era capaz de mantenerle a raya. Vilander continuó apretando, pero a las 11:46 saliendo de las curvas Porsche trompeaba y perdía la estela del vehículo del equipo Ford Chip Ganassi.
A partir de ese momento las posiciones estaban ya decididas: Ford lograba la victoria en GTE Pro con el GT número 68, seguido del Ferrari número 82, los Ford número 69 y 66, los Aston Martin número 95 y 97 y el Corvette número 63 con García entre su tripulación por delante del Porsche 911 número 77. De este modo, la marca del óvalo regresaba al triunfo en Le Mans con una nueva encarnación del legendario GT40 (entonces conocido como Mark II), cuyo propósito exclusivo fue el de batir a los de Maranello – y lo logró de 1966 a 1969.
