Miguel Molina llegó para disputar su cuarta carrera del año, y lo hizo como líder del Campeonato del Mundo FIA de Resistencia, tras su convincente victoria en los 1812 km de Catar junto a Antonio Fuoco y Nicklas Nielsen.
También se trataba de un fin de semana con un significado especial: el equipo con el dorsal 50 iba a competir en el circuito de casa para Ferrari, frente a miles de apasionados fans del Cavallino Rampante, en el corazón de la Emilia-Romagna. Una ocasión simbólica en muchos sentidos, puesto que esta carrera de casa conlleva responsabilidad, orgullo y fuertes emociones.
A pesar de una metódica preparación de cara a las condiciones cambiantes del clima durante los entrenamientos del viernes, el fin de semana no acabó con el escenario esperado. Durante la calificación del sábado por la tarde, Antonio Fuoco vio como la Hyperpole se le escapaba de las manos debido a la anulación de dos vueltas por los límites de pista.
El equipo debió afrontar la carrera desde la parte trasera de la parrilla en los Hypercar, pero su reacción fue casi instantánea. Desde la 18ª posición, el trio de la Ferrari #50 499P emprendió una lucha brillante. Desde la vuelta inicial, Nicklas Nielsen implementó una atrevida estrategia, ganando tres posiciones inmediatamente, y continuando su presión hasta la cuarta plaza.
“El final de semana fue bien hasta la calificación. Saliendo desde atrás, sabíamos que teníamos que emplear una estrategia agresiva para poder escalar posiciones. Niklas hizo un trabajo fantástico en los primeros stints, y luego optamos por lograr avances gracias a la mejor estrategia de neumáticos posible. Por desgracia, no pudimos optar a la lucha en primera fila, pero el plan que aplicamos iba bastante bien.”
A las dos horas de carrera, Miguel Molina tomó los mandos del #50 Ferrari 499P logrando un sólido e inteligente stint para mantener ese gran momento del equipo en remontada. Serio y diligente para ir afrontando los desafíos de una carrera más animada de lo habitual, se ciñó a la estrategia a la vez que batallaba de manera formidable contra sus adversarios para mantenerse en la lucha por el podio.
“Mantuvimos los neumáticos de Niklas para el tercer stint, que fue mi primero, y en general, fue un run muy bueno. En el segundo stint intentamos apretar más cambiando solo las dos ruedas de la parte derecha, para ganar posición en pista. Al final, no resultó, porque empezamos a perder ritmo y cedimos algunas posiciones. En ese momento nos dimos cuenta de que podía ayudar a nuestra estrategia, ajustamos el plan y adelantamos el pit. Fue acertado porque permitió que Antonio saliera con aire limpio y una pista despejada frente a él."
La estrategia dio sus frutos: Antonio Fuoco tomó el mando en las dos últimas horas, moviendo el #50 hasta el segundo puesto antes de su última parada, a menos de una hora del final. Por desgracia, un contacto con el #8 de Toyota resultó en pinchazo, y ahí se desvanecieron las posibilidades de podio. El trio recibió una penalización de drive-through posterior a la carrera, lo cual relegó al Ferrari 499P #50 a la 15ª posición, lejos de lo que hubiesen merecido.
"La carrera ha sido muy dura para todo el equipo. Es descorazonador abandonar Imola con las manos vacías, especialmente tras haber batallado tan duro. Fuimos rápidos hasta el pinchazo casi al final, y creemos que una p2 o una p3 hubiera sido posible si las cosas hubieran ido de otro modo. No estamos contentos con el resultado, pero seguimos en la lucha. Somos terceros en la clasificación del campeonato, justo tras nuestros compañeros, y la temporada sólo ha hecho que comenzar. Haremos un reset y regresaremos más fuertes en Spa, en dos semanas. Quiero felicitar a mis compañeros de Ferrari por su increíble victoria aquí en casa. El ambiente ha sido increíble con todos los tifosi demostrando su apoyo incondicional. Siempre es muy especial correr en Italia, y ha sido genial ver ganar a Ferrari frente a los fans, y lo que la marca representa para este país.
Aunque los resultados no demuestran los actuales méritos de sus prestaciones, una estrategia coherente, la velocidad demostrada en pista, reflejada en la vuelta rápida de la carrera obtenida por Antonio Fuoco, y la unidad del trio son signos importantes a tener en cuenta. Miguel Molina y sus compañeros son terceros en la clasificación general, a un punto del segundo clasificado y a 12 puntos de los líderes.
Antes de volver a la competición con el #50 en las 6 Horas de of Spa-Francorchamps, Miguel Molina participará en las 4 Horas de Le Castellet (del 2 al 4 de mayo) . Estará a los mandos del Ferrari 296 LMGT3 de Kessel Racing junto a Fran Rueda y Andrew Gilbert, en la segunda ronda de las European Le Mans Series.
