Viento, frío y agua. La tempestad se desató sobre el trazado urbano de Bakú, como ya ocurriera el pasado año, afortunadamente en esta ocasión sin que ello haya condicionado la celebración de la segunda sesión de entrenamientos libres, si bien los pilotos si han tenido que extremar la precaución, pues un choque con los muros de hormigón bien podría significar tirar a la basura cualquier posible opción de resultado este fin de semana, cierre de las Blancpain Sprint Series.
Como siempre ocurre en condiciones complicadas, loas Audi R8 LMS Ultra volvieron a asomar la cabeza, más aún si éste está pilotado por el belga Laurens Vanthoor, que se colocó en primera posición tras marcar una vuelta rápida estratosférica en 1’39’’194, dejando al segundo clasificado, el BMW Z4 de Alex Zanardi a 741 milésimas de distancia. La tercera posición la ocupó el Lamborghini de Grasser con un gran pilotaje de Jeroen Bleekemolen, pero ya a más de un segundo de distancia.
Destacable quinta posición para la pareja Enzo Ide y René Rast con un tiempo de 1’40’’583 a bordo del Audi R8 del equipo WRT, con el que se colocaron de nuevo por delante de un sorprendente Prosche 997 del equipo Autorlando Sport, con Richard Westbrook y Norbert Siedler al volante.
Andy Soucek y Jonathan Adam repitieron en la séptima posición, esta vez con una vuelta rápida marcada en 1’40’’838 a bordo del Aston Martin Vantage del equipo Beechdean apoyado por AMR. En esta ocasión los Maximilian, quizás más cautos que de costumbre, cayeron hasta el decimocuarto lugar, con una vuelta rápida marcada por Gotz en 1’42’’080, muy lejos de las posibilidades del coche.
Miguel Toril y Benjamin Hetherington mejoraron su posición de los primeros libres y se colocaron en decimonovena posición, como segundo mejor clasificado de la Silver Cup justo por detrás del Audi R8 de WRT pilotado por Abril y Lisowski. Benji hizo valer su experiencia en mojado para lograr una vuelta rápida en 1’42’’499 con el Mercedes SLS AMG GT3 del equipo Fortec.