La temporada de Formula 1 avanza, y poco a poco irá llegando a su fin para que empiece la revolución de 2022. La próxima temporada habrá una nueva reglamentación que hará que los monoplazas sean completamente distintos a los actuales. Una de las grandes novedades será la vuelta del famoso 'efecto suelo', que permite a los monoplazas seguirse de cerca sin que el coche de detrás sufra en la manera de pilotar debido al aire sucio del monoplaza de delante, lo que permitirá más posibilidades de adelantamiento.
Con la ventaja del 'efecto suelo' en la Formula 1 hay un debate sobre la continuidad del DRS, un alerón trasero que se abre cuando un monoplaza pasa por la zona de detección del DRS a menos de un segundo del coche que tiene delante y le da una ventaja de unos 15km/h para adelantarlo. El DRS llegó en el 2011 para fomentar los adelantamientos y hacerlos más fáciles en carrera. Pero ahora se ha creado un debate sobre si el DRS debe seguir o no en la Formula 1.
Sin embargo, Ross Brawn, director ejecutivo de la F1 ha dejado claro que no se plantean quitarlo a corto plazo. "Continuaremos trabajando con el DRS. Mi esperanza es que en los próximos años los coches de carreras se desarrollen de tal forma que algún día podamos prescindir de ello. Pero eso no sucederá en un futuro próximo. El DRS es necesario para la naturaleza de estos autos de carreras".
Desde McLaren creen que mantener el DRS de momento es bueno, ya que los nuevos monoplazas aún son una incognita. "Todos los cálculos dicen que los conductores pueden atacar mejor con estos coches. Pero hasta que los monoplazas estén en la pista, no lo sabremos. Hasta que comprendamos las complejidades de la nueva generación de modelos, no es malo mantener DRS", apuntaba Zak Brown.