Enea Bastianini fue una de las grandes sorpresas del Gran Premio de Tailandia de MotoGP. Tras un inicio de temporada complicado con la KTM, la adaptación a su nueva montura no fue sencilla y las dificultades persistieron hasta la carrera al sprint. Sin embargo, el italiano logró dar un paso adelante en la prueba del domingo, finalizando en una meritoria novena posición y quedando a solo un suspiro de la mejor RC16, pilotada por Brad Binder.
El piloto del equipo Tech3 explicó que se tomó la carrera como un test para entender mejor sus puntos fuertes y débiles. "Hemos ido paso a paso y he conseguido terminar en el Top 10, lo cual es un buen resultado para ser mi primera carrera con esta moto. Aun así, sabemos que hay que seguir trabajando duro", comentó tras la carrera. Bastianini destacó que su confianza con la moto mejoró a lo largo del fin de semana, lo que le permitió alcanzar un ritmo competitivo en la carrera.
El italiano también identificó áreas clave en las que debe mejorar, especialmente en la entrada y salida de las curvas, donde todavía pierde velocidad respecto a sus rivales. "Nos cuesta hacer girar la moto y eso nos penaliza en la primera parte de la aceleración", reconoció. Aun así, se mostró optimista sobre su evolución y destacó que la información recogida en Buriram será clave para seguir mejorando en las próximas carreras.