El calor está afectando a Suzuki en Barcelona, la gestión de los neumáticos se les complica y la carrera será de supervivencia para ellos.
“Seguramente sí, lo será porque aquí en Barcelona siempre es así. Será una carrera muy, muy dura, muy difícil, muchísimo”, explicó el italiano.
Ahora mismo, acertar en la elección de los neumáticos y que éstos aguanten toda la carrera apunta a ser la clave.
“En mi opinión, la moto que mejor gestione el consumo de las gomas es la que va a ganar al resto. Este aspecto es muy importante. Ducati y Honda son los que mejor las cuidan. Habrá que estar muy atentos a la segunda mitad de la carrera porque alguna Ducati satélite puede llegar a los de delante. No hay que infravalorar a nadie”.
Iannone saldrá quinto en parrilla, desde la segunda fila, y tendrá la oportunidad de empezar con los de delante.
“Va a depender de la temperatura, si el ambiente es menos caluroso, como esta mañana, me veo bien. Si hace calor, estoy un poco peor y nuestro problema es que no podemos gestionar las gomas de ninguna manera. Ningún compuesto va bien, cuando cae la goma perdemos el ritmo, todo es muy difícil, entrar en curva, acelerar, ahora mismo este es nuestro límite más grande”.
Pese a su buena clasificación este sábado, Iannone es consciente de que sus opciones de optar al podio son limitadas.
“No hay nada imposible, pero en este momento no estamos para podio. Las Ducati están en forma, Márquez está en forma pese a ir al límite, y la temperatura nos perjudica mucho. Si mañana hace menos calor estaré muy feliz. Pero con tanto calor pierdo el feeling con las gomas, patina mucho. Es lo mismo para todos, pero nosotros lo sufrimos más”, zanjó el de Vasto.
