Después del Grand Chelem conseguido por Charles Leclerc en Australia, el vigente campeón del mundo lo ha logrado en el Gran Premio posterior, en Imola. Max no solo ha sumado el máximo de puntos posibles tanto en la sesión al sprint como en la carrera del domingo, sino que ha logrado la pole, la vuelta rápida y ha liderado las 63 vueltas al circuito italiano.
Además, Sergio Pérez también había tenido una gran actuación, por lo que esos puntos conjuntos valen oro para el campeonato de constructores, ya que la distancia con Ferrari ha disminuido drásticamente y ambos equipos ahora están separados por 11 puntos.
"Tener un fin de semana como este, con un 1-2 para el equipo es sencillamente increíble. Fue más o menos un fin de semana perfecto, todo se ha hecho bien, podemos estar orgullosos como equipo. Necesitamos seguir concentrados, sabemos que necesitamos estar arriba de nuevo en la próxima carrera", concluye Verstappen en el comunicado de prensa publicado en la web de Red Bull Racing.