"A Barcelona hemos traído lo justo para probar. Hay que enseñar lo mínimo posible porque te lo copian". Así ha respondido el vigente campeón de Fórmula 1, Lewis Hamilton, a las preguntas que los periodistas le han formulado esta tarde en rueda de prensa, según recoge el diario Marca. Y es que, al parecer, la escudería alemana mantiene guardado bajo llave el verdadero potencial del W07. El Mercedes ha sido el coche que más vueltas ha completado al trazado catalán de Montmeló durante los primeros test de pretemporada, pero no el monoplaza que ha cosechado los mejores tiempos.
Hamilton ha aprovechado su intervención para mostrar su malestar con algunos de los cambios que se introducirán el próximo año en la categoría reina del automovilismo. El piloto británico ha cargado, entre otras cosas, contra el incremento de peso que sufrirán los monoplazas en 2017. "Cuando llegué a la Fórmula 1, el coche pesaba unos 600 kilos y ahora pesa unos 100 kilos más. Es ridículo hacerlos más pesados porque los neumáticos sufrirán más. En los últimos días he estado probando los neumáticos nuevos y me he preguntado ¿por qué es tan difícil conducir? ¿Por qué se desliza el coche de esta manera? Y creo que el aumento de peso es lo que marca la diferencia entre la conducción de antes y la de ahora", ha asegurado Hamilton a Motorsport. De igual modo, el tricampeón de Fórmula 1 ha afirmado que las gomas ideadas para la próxima temporada "no son mejores que las del año pasado" porque "no me dan más agarre".
El nuevo sistema de clasificación también ha sido uno de los temas sobre los que el piloto de Mercedes ha ofrecido su punto de vista. "Realmente, para ser honesto, no creo que este nuevo modelo vaya a cambiar mucho las cosas", ha comentado Hamilton y, a su vez, ha añadido que le gustaría una mayor intervención de los pilotos en la configuración de los nuevos reglamentos ya que "tenemos algunas ideas que los podrían mejorar".
