Un año más, Jamie Green parece estar dispuesto a quitarse la etiqueta de eterno aspirante en el DTM. El británico, que afronta su quinta temporada como piloto de Audi, se impuso en la segunda prueba de Hockenheim disputada el domingo, tras un sábado más discreto, obteniendo así el 14º triunfo de su carrera en el DTM, y el quinto en Hockenheim.
Partiendo desde la tercera posición, Green se puso segundo en la salida mientras que, por detrás, un accidente en la primera curva entre Robert Wickens, Nico Müller y Loïc Duval obligaba a neutralizar la prueba con un Safety Car. En una resalida frenética, la primera de la historia del DTM a doble fila, con hasta cinco coches en paralelo, Green consiguió hacerse con el liderato adelantándose al poleman Timo Glock. Esto le valió una sanción de 5 segundos a posteriori, pero ni eso ni la posterior aparición de la lluvia amenazaron su lugar de privilegio.
El acompañante de Glock en la primera línea, René Rast, tuvo una primera vuelta para olvidar, cayendo al 13º lugar, justo detrás de un Edoardo Mortara que tuvo que irse largo en la primera curva. Por el contrario, Mike Rockenfeller se ubicó tercero, para perder hasta seis puestos en la resalida. Lucas Auer, que ganó cuatro puestos en el primer giro, se aupó a la segunda posición en la resalida, por delante de Bruno Spengler, quien perdió varios puestos en las siguientes vueltas, y Glock.
Mientras, Mattias Ekström aprovechó la salida de pista de Gary Paffett para escalar al quinto lugar, y en la novena vuelta alcanzó posiciones de podio. En pleno proceso de paradas, entre las vueltas 15 y 20, la lluvia que amenazaba terminó por caer. El gran beneficiado de todo fue Marco Wittmann: habiendo salido penúltimo, el alemán era décimo tras la primera vuelta, subió a la sexta posición en la resalida y, pese a perder posición en pista con Mortara, alargar su parada hasta el giro 18 le permitió ubicarse tercero por delante de Paffett.
Por otro lado, gente como Ekström o Glock, que adelantaron su parada, o Mortara, que trompeó poco antes de hacer la suya, perdía puestos. Green y Auer optaron por alargar su parada más que nadie, hasta las vueltas 19 y 20, y eso les permitió conservar posiciones, aunque Auer terminó perdiendo dos puestos al pasarse de frenada bajo la lluvia en la horquilla. Una vuelta después, Paffett rebasó a Wittmann, para sellar en pista su segunda posición.
Algo más atrás, una excelente parada en boxes fue la clave de la quinta posición de Müller, quien logró terminar por delante de Paul di Resta y Rockenfeller. Tras las paradas, el único piloto en ganar puestos de forma profusa fue Glock, quien tuvo que parar de nuevo desde el sexto lugar por un pinchazo. Pasó a varios coches hasta situarse octavo, por delante de Spengler, Engel (adelantado en la última vuelta) y un Ekström al que, en esta ocasión, la estrategia jugó una mala pasada.
Al término de este primer fin de semana de competición, Auer, que ha sumado los mismos top 4 que había obtenido en dos años, lidera la tabla con 40 puntos, frente a los 26 de Green y Paffett, los 25 de Glock y los 21 de Rockenfeller. En sexta posición, se asoma el vigente campeón Wittmann, con 16. Los pilotos tendrán una nueva oportunidad de medirse dentro de dos semanas, en Lausitzring.